Reby es la startup integrada en el sector de la movilidad urbana a través del alquiler de patinetes. Opera desde enero de 2019 y cuenta con 90 empleados. Tienen más de 3.0000 vehículos operativos y el alquiler es de 0,15 céntimos por minuto, además de 1 euro de desbloqueo. El motivo de este coste extra es que pretenden educar a la población para que ir andando sea la primera opción. La empresa apuesta por un modelo sostenible en el que impere el transporte en patinete, motos o bicicletas, pero sobre todo eliminar los coches de las ciudades.
Pep Gómez tiene 27 años y su interés por adentrarse en aquellos sectores que no están regulados le llevó a abandonar progresivamente su primer proyecto empresarial, Fever, y fundar su segunda empresa en 2018. En una entrevista con MERCA2 expone interesantes cuestiones sobre el sector al que se dedica y los principales factores que diferencian a Reby del resto de empresas del mercado como Uber o Lime, que denomina «depredadoras».
Sobre la facturación de Reby, Pep explica a MERCA2 que no facilitan información financiera: “Es muy buena, pero no queremos ser vistos como empresa”. Aun así, asegura la rentabilidad de la Reby.
¿Cuáles son los principales retos en el sector de la movilidad urbana?
Hay mucho miedo por parte de la Administración Pública, y con razón, del modelo depredador de grandes empresas americanas. Los modelos de China y Estados Unidos carecen de regulación y permiten dejar el vehículo en medio de la calle. Europa es diferente y creemos que necesita una regulación estricta, esto no significa que los ayuntamientos se dediquen a prohibir actividades, sino que deben regular.
¿Qué modelo debería ser la regulación sobre movilidad urbana?
Mixto. El modelo probable es que se marquen unas directrices a nivel nacional, marcadas por la DGT, por ejemplo, limitaciones de circulación y velocidad. Sin embargo, la parte que tiene que ver con estacionamiento en la vía pública tiene que ser regulado por cada ayuntamiento. En materia de regulación, nos gustan modelos como el de Barcelona, en el que se preocupan por sacar un paradigma que no moleste al peatón y buenas prácticas de aparcamiento.
Tres factores diferenciadores de Reby son…
La seguridad de los vehículos. La concienciación empresarial con el medioambiente. Adaptación a la normativa local.
¿Qué tecnología utilizan los vehículos de Reby?
Cuentan con un candado inteligente para anclarse a las «U» invertidas de las ciudades, algo que nunca se había visto en una empresa de patinetes, incide Gómez. “Hemos desarrollado un motor con IA que detecta cuando está mal aparcado el patinete y envía un email al usuario, que, a la segunda vez de realizar esta mala práctica, le multa.
¿Por qué Gijón, Zaragoza y Barcelona?
Operamos en sitios donde no hay un número excesivo de empresas. Son ciudades a las que nadie se quiere adaptar porque son lugares más regulados. En el caso de Zaragoza llegamos por concurso público; en Barcelona te exigen cumplir una normativa de seguros y anclaje; y en Gijón existen grandes limitaciones acerca no de invadir al peatón. El resto de empresas no quiere adaptarse a estas ciudades porque consideran que ganan menos dinero.
El 100% de los patinetes son fabricados por vosotros, ¿sale rentable fabricar los propios patinetes?
Es cierto que nos cuesta más que a los competidores, pero sale rentable. Cumplimos tanto directrices de la Unión Europea como normativas locales que permiten que nuestros vehículos sean más duraderos en el tiempo y además se adaptan a las normativas presentes y futuras. A largo plazo es mucho más rentable.
¿Cuáles son los nuevos proyectos de Reby para los próximos meses?
Estamos trabajando en un vehículo nuevo de dos ruedas. Se anunciará en los próximos meses y tendrá carácter propio, al igual que los patinetes. También queremos abrir más ciudades este año, pero todavía no hay nada claro.