Si antes era fundamental lavarse bien las manos antes y después de realizar cualquier tipo de actividad, ahora esto está más presente que nunca. Sin embargo, parece que nuestra piel tampoco está preparada para ese lavado excesivo y podría llegar a padecer algún tipo de problema a largo plazo.
Cuando se descubrió el jabón, aunque ahora sea un producto que tenemos tan normalizado, todo cambió en el mundo. Las muertes y epidemias debidas a infecciones e intoxicaciones se redujeron hasta límites insospechados por su poder desinfectante. Y ahí nació una nueva era. Desde que se publicaron sus importantes propiedades, nos hemos acostumbrado a usarlo en todo momento. Aunque, eso sí, como siempre, el exceso nunca es bueno para nada.
Cuando nos lavamos las manos eliminamos las bacterias, parásitos, hongos y otros restos contaminantes. No obstante, cuando este lavado se vuelve demasiado excesivo, podemos llegar a sufrir algunos contratiempos. Descubre los problemas de piel que tendrás si te lavas mucho las manos.
2La flora bacteriana será menor
Conocemos como flora bacteriana a los hongos, bacterias, etc. que habitan en nuestra piel. Estas suelen ser buenas para nosotros, pues fabrican sustancias que nos protegen de otros patógenos externos.
Cuando nos lavamos las manos en exceso, es cierto que nos deshacemos de los patógenos malignos que pueden infectarnos, pero también de esta flora bacteriana con la que convivimos en una simbiosis pacífica y beneficiosa. No le daremos tiempo a regenerarse, aunque es cierto que esta resiste mejor el jabón.
Si esto llega a ocurrir, estaremos rebajando las defensas de la piel de nuestras manos, dejando vía libre a las infecciones para que puedan aparecer a través de ellas.