La Asociación Española de Capital, Crecimiento e Inversión (Ascri) considera que los 140.000 millones de euros de fondos europeos que llegarán a España para impulsar su recuperación por la crisis del Covid-19 son «una oportunidad histórica» y ve fundamental que el capital privado sea «parte de la solución» para que ese dinero se use «con cabeza».
«Nos preocupa mucho el uso de ese dinero, es una oportunidad histórica y una herramienta de primera magnitud para ser optimistas. Es muy buena noticia, pero hay que usarlo bien», explica el presidente de Ascri, Aquilino Peña.
Para que ese dinero «llegue a donde tiene que llegar de forma eficiente», Peña asegura que el capital riesgo «tiene que ser parte de la solución, porque aporta metodología y mecanismos». Por eso, considera necesaria la colaboración público-privada que «evite que haya un uso partidista o populista».
Desde el punto de vista de la patronal, los proyectos que reciban financiación deben cumplir los criterios que sigue el ‘private equity’ y el ‘venture capital’: ser viables, priorizar la digitalización, generar un retorno positivo y fomentar la cohesión social, además de buscar, «sobre todo, la creación de empleo».
Asimismo, Peña insiste en que una parte de estos fondos debe destinarse a ayudas urgentes a los sectores más perjudicados de forma directa por la pandemia y que son fundamentales para el PIB de España, como el turismo y la restauración. «Hay que hacer un plan de choque para ellos, aunque el foco esté en lo otro», señala.
LA INVERSIÓN PUEDE CERRAR EL AÑO AL NIVEL DE 2019
La inversión de capital privado en España se redujo un 67% en el primer semestre del año, dado que no se cerraron operaciones de gran volumen durante los primeros meses del Covid-19. No obstante, el presidente de Ascri pronostica que la inversión total aún puede acabar el año con cifras «similares» a las de 2019.
Tras la reciente operación de Idealista, vendida por Apax a EQT por 1.321 millones de euros, Peña cree que aún se necesitarían «un par de operaciones de ese calibre» para alcanzar las cifras del año anterior. Además, debería culminarse la OPA sobre MásMóvil formulada por Lorca Telecom Bidco (KKR, Cinven y Providence), una operación superior a los 3.000 millones de euros, antes de finales de año.
«Será difícil, pero aún es posible. Llevábamos tres años consecutivos mejorando cifras y las razones que nos llevaban a esos récord siguen estando ahí. España es un mercado fabuloso», ha asegurado el socio fundador de Kibo Ventures.
PAÍS ATRACTIVO PARA FONDOS INTERNACIONALES
Peña asegura que la percepción de los inversores extranjeros es que España «sigue siendo un gran país para invertir» y estima que estos actores representen en torno a la mitad de la inversión en capital privado este año, en línea con ejercicios anteriores.
No veo que un Gobierno de determinado signo genere rechazo a los inversores internacionales, que confían en el marco jurídico estable. Ahí no anticipamos ningún desastre», añade el presidente de Ascri.
RIESGO DE UN NUEVO PARÓN ECONÓMICO
En cuanto a los mayores riesgos para el capital privado, el presidente de Ascri asegura que siguen muy de cerca la evolución de los ERTE para ver cuántos terminan consumándose en despidos, y la situación epidemiológica, que confían en que no arrastre a la economía a un nuevo parón que impida vender a las compañías.
«Esos factores podrían afectar negativamente al número de operaciones de capital privado, porque generarían mucha incertidumbre económica, una crisis de demanda y resentirían las operaciones al ajustarse a la baja las valoraciones», argumenta Peña.
RETOS: PLANES DE PENSIONES Y ASG
Aquilino Peña, que asumió la presidencia de Ascri este verano, fija entre los principales retos para la patronal conseguir que la inversión en capital privado tenga más protagonismo en las carteras de activos de los inversores institucionales, actualmente muy inferior a la media europea.
Asimismo, la asociación trabaja para que la normativa que limita las comisiones en cascada se modifique de forma que los planes de pensiones tengan acceso a la inversión en ‘venture capital’ y ‘private equity’, y beneficiarse de «altas rentabilidades».
Por último, Ascri quiere fomentar los criterios ambientales, sociales y de buen gobierno (ASG) con su integración en los procesos de inversión del capital privado, para que integren análisis de impacto extra-financiero, una cuestión que «cada vez piden más» sus asociados.