La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos fue sólo el primer capítulo de un debate que promete prolongarse durante años. Autor de propuestas controvertidas, el empresario ya era famoso antes de llegar a la Casa Blanca, sobre todo por sus proyectos y vida a todo tren.
Entre las propiedades inmobiliarias, yates y otros bienes, el millonario Trump también acumula una colección respetable de coches. La industria del automóvil, de hecho, ha tenido una influencia (aunque indirecta) en la victoria republicana: el candidato ganó votos significativos en algunos estados más afectados el frenazo de la industria automotriz de Estados Unidos y el traslado de fábricas a países cercanos, como México.
Estas son algunas de las joyas que son parte de la colección del futuro presidente de la nación más poderosa del mundo.
Mercedes-Benz SLR McLaren
Los clientes VIP pueden disfrutar de algunas ventajas cuando se compra cochazos. Fue lo que sucedió cuando Trump compró un Mercedes-Benz SLR McLaren en 2005. Después de pagar una suma de 544.000 dólares, la compañía llevó a cabo su propia entrega en la Torre Trump en Nueva York.
Es es uno de los modelos deportivos da Mercedes-Benz, equipado con un motor V8 que le permite alcanzar una velocidad de 384,76 km/h y a tener una aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 3,2 segundos.
Maybach Mercedes-S600
Amante confeso de los modelos alemanes, Donald Trump se compró un Mercedes Maybach-S600. La versión ultra-lujosa del Clase S incluye mimos como dos asientos individuales reclinables hasta 43 grados, nevera portátil entre los bancos, tazas de champagne bañadas en plata y techo solar panorámico con una tecnología que oscurece los cristales para proporcionar más privacidad.
El motor es un CV 5.0 V12 de 630. Un coche digno de un presidente y de un hombre de negocios acostumbrado a lo mejor.
Lamborghini Diablo
Fabricado de 1990 a 2001, el Diablo era el sueño de toda una generación. Pero Donald Trump no es hombre de quedarse con las ganas y se compró un ejemplar de la belleza. Y no uno cualquiera: se trataba de un Diablo VT Roaster con tracción a las cuatro ruedas, capó de fibra de carbono y un V12 con 500 caballos de potencia.
El multimillonario, sin embargo, parece no haberse entendido muy bien con la transmisión manual de la bestia italiana, porque unos años más tarde los vendió. Recientemente, esta unidad (con sólo 24.586 kilómetros) fue subastado por no menos de 460.000 dólares.
Chevrolet Camaro Indy Pace Car
Este modelo ‘made in Detroit’, utilizado como coche de seguridad en las 500 Millas de Indianápolis e inspirado en el modelo original de 1969, también parece tener un lugar de privilegio en la flota del excéntrico republicano.
Bajo el largo capó está un V8 de 426 caballos de potencia, con casi todas las opciones disponibles, y una combinación de colores para que coincida con el legendario ’69 Camaro Pace Car. Este es uno de los coches que no se sabe, con certeza, si pertenece realmente al millonario o si sólo lo tuvo para alguna ocasión especial.
Tesla
Aún que los recursos ambientales parecen no preocupar especialmente al magnate, Trump posee un vehículo eléctrico Tesla. A juzgar por su afición a los vehículos de lujo, la opción más probable debe haber sido el modelo S60, lanzado en los EE.UU. en 2012.
Impulsado por dos motores (uno instalado en cada eje), tiene una potencia combinada estimada de 600 caballos. El modelo Tesla S60 puede almacenar 60 kWh de energia e va de 0 a 60 km/h en 5,9 segundos. Una maravilla que proporciona al millonario la posibilidad de cuidar un poco el ambiente.
Ferrari
La prensa estadounidense dice Trump posee un Ferrari, nada demasiado sorprendente para un millonario que le gustan los coches. Sin embargo, no se sabe a ciencia cierta cuál es el modelo elegido por el futuro presidente de Estados Unidos.
Se habla que puede ser un Ferrari 458 Italia, un automóvil superdeportivo, diseñado por Pininfarina y producido por el fabricante italiano desde el año 2010 como remplazo al Ferrari F430. El motor incorpora la inyección directa de combustible por primera vez en un Ferrari con configuración de motor central, ideal para un líder mundial
Rolls-Royce Phantom
Trump ha ganado muchos miles de millones de dólares a lo largo de su vida y cuando se sienta a conducir le gusta conducir lo mejor, que en este caso es el Rolls-Royce Phantom.
El Phantom vale cerca de 500.000 de dólares, y puede ser construido y diseñado según los pedidos del nuevo propietario. Conociendo la inclinación de Trump por ser distinto, seguro que lleva alguna especificación original fuero de lo común. Cierto es, que no es uno de los coches que más saca a relucir pero cuando lo hace le encanta dejar en casa al chofer.
Rolls-Royce Silver Cloud
Además de su Roll-Royce Phantom actual, Trump también guarda en su garaje un Rolls-Royce aún más valioso. Es una hermosa nube de plata fabricado en la década de 1950, una de las opciones más elegantes para un futuro presidente. El Roll-Royce Silver Cloud.
Se estima que el coche alcanza una velocidad máxima de 165,6 km/h y una aceleración de 97 km/h en 13.5 segundos, con un consumo de carburante de 19,5L/100km. Un clásico que da aún más color a la amplia colección de autos de Donald Trump. Fuentes cuentan que este es uno de los modelos más apreciados por el polemico hombre.