Todos nos podemos equivocar, de eso no hay duda. Pero no es lo mismo que nos equivoquemos nosotros a la hora de decir unas palabras entre amigos que equivocarse siendo el secretario de un partido político. Pero esto les ha pasado a todos, incluso a Pablo Iglesias, ese que «nunca» se equivoca.
Pero claro que se equivoca y que, además, seguro que se arrepiente de haber hecho más de una declaración. Ahora habría cerrado la boca. Pero, ¿Cuáles son esas cosas que dijo y que dejan en evidencia a Pablo Iglesias? Vamos a conocer algunas de las frases que ha dicho y de las que se arrepiente.
Después del asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación de León
No todo lo que suelta por la boca Pablo Iglesias está premeditado, o por lo menos no es precisamente lo que parece. Tras el asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación de León, Pablo Iglesias pronunció un pequeño discurso del que, suponemos, no se deberá sentir demasiado orgulloso.
«En este país en el que estamos viviendo un drama social, nunca hemos visto a los partidos suspender actos cuando una desahuciada se tira por la ventana o cuando un parado despedido se quita la vida”.
Hablar de esta forma de la muerte de alguien no es plato de buen gusto, desde luego que no, sea de tu partido o no, ¿No crees? Pablo no ha pedido perdón por estas palabras, pero suponemos que cada vez que las recuerda lo lamentará mucho.
Pablo Iglesias y su discurso sobre ETA
Pablo Iglesias no está a favor de la violenta, es más, siempre ha defendido la paz y el llegar al entendimiento por medio del diálogo. Es por eso por lo que Pablo Iglesias dijo estas palabras: «Podemos condena la actividad de ETA. Fin de la cita».
Fue la respuesta que Pablo Iglesias le dio a Esperanza Aguirre, pero también se ha visto envuelto en otras polémicas por culpa de las siguientes declaraciones: «Cualquier demócrata debería preguntarse si ¿no sería razonable que los presos de ETA deberían ir saliendo de las cárceles?»
¿En qué quedamos, Pablo? ¿Condena Podemos la acción de ETA o no? El hecho de que pida que liberen a los presos de ETA no dice mucho a su favor, especialmente de cara a unas elecciones. ¿Quién querría ver fuera de la cárcel a los miembros de la banda?
Sobre Venezuela y el chavismo
A Pablo Iglesias siempre se le ha relacionado con el chavismo y con Venezuela, es más, muchos pensaban que si salía escogido presidente impondría una política muy parecida. La cuestión es que Pablo negaba todo esto, pero sus palabras no decían lo mismo:
«Todos somos contingentes, pero Chávez era necesario. Los que simpatizamos con el proceso bolivariano siempre estuvimos preocupados porque el mismo estuviese vinculado a la figura de Hugo Chávez Frías»,
«Chávez se convirtió en uno de los principales motores del cambio en América Latina. Los procesos de cambio requieren de liderazgo, de símbolos, de gestos individuales y de personalidades carismáticas, capaces de llegar a sintetizar la voluntad colectiva (…). Chávez es ya Bolívar, ya cabalga como estandarte».
No sabemos si Pablo se arrepentirá de esto o no, pero lo que sí sabemos es que sus palabras le delatan, y mucho.
Sobre el empobrecimiento de los ciudadanos
Iglesias siempre se caracterizado, o eso es lo que piensa él, por ponerse del lado de las personas más desfavorecidas, del pueblo. Es por eso mismo por lo que siempre ha soltado frases, o pequeños discursos, como la siguiente:
“Se está empobreciendo a la gente. Desde los años 30 sabemos que de las crisis no se sale empobreciendo sino invirtiendo en la gente. Hay que acabar con los paraísos fiscales y subir los impuestos a los más ricos para destinarlo a inversión y que la gente no tenga que pagar la deuda de los bancos”.
Esto que dice no es ningún misterio. Todos los sabemos, pero ¿Sabe Pablo Iglesias que de ser así deberían subirle los impuestos a él mismo? Seguro que cambiaría de idea si esto fuera así.
En su primer discurso en el Parlamento Europeo
Estar en el Parlamento Europeo no es cualquier cosa. Es algo muy importante e incluso es posible que la primera vez allí de un poco de respeto. Es por eso por lo que Pablo Iglesias, en su primer discurso en el Parlamento Europeo, no estuvo del todo acertado:
«Es escandalosa la facilidad con que se mueven aquí los lobbies al servicio de grandes corporaciones (…) que convierten a los representantes de la ciudadanía en millonarios a sueldo de grandes empresas (…) y hurta la soberanía de los pueblos, atenta contra la democracia y convierte los representantes políticos en casta».
¿Se arrepentirá de haber pronunciado esas palabras? Pocas veces hemos visto rectificar a Iglesias, por no decir nunca, aunque hablar del Parlamento Europeo son palabras mayores.
Sobre los impuestos, las familias y las grandes empresas
Y volvemos a los impuestos. Pablo está bastante obsesionado con los impuestos que pagan las familias españolas, pero, ¿Y lo que paga él? Sabemos que Iglesias se considera del «pueblo», aunque no todo el mundo cobra lo que él percibe por ser un miembro del Congreso.
«Las familias pagan 50 veces más impuestos que las grandes empresas» y además «aportan alrededor del 90% de la recaudación y las empresas el 10%, y menos del 2% las grandes empresas».
¿Cuánto aporta Pablo Iglesias? ¿Sabe él que eso que critica es exactamente lo que él mismo es? Parece que no y que aún no ha abierto los ojos al respecto.
Su crítica al ático de lujo de Luis de Guindos
Pablo Iglesias se ha comprado una casa junto a su compañera, Irene Montero. Pero no una casa cualquiera. No. Sino un chalet que, según las últimas noticias, está valorado en unos 850.000 euros. Una barbaridad y es que, ¿Quién puede comprarse eso siendo de la clase trabajadora?
La cuestión es que en el año 2012, en Twitter, Iglesias criticó que el entonces ministro de Economía, Luis de Guindos, se comprara una casa valorada en 600.000 euros: «Que la política económica la dirija un millonario es como entregar a un pirómano el Ministerio de Medio Ambiente.
Ahora es él que se ha comprado un casoplón y que hace eso que tanto ha criticado. ¿Cómo le ha sentado al resto de su partido? O, mejor dicho, ¿Cómo les habrá sentado esto a los seguidores de Podemos?
Todos estamos de acuerdo en que Pablo e Irene tienen que tener una casa amplia, especialmente ahora que van a tener niños, pero, ¿Era necesario gastarse ese dineral? Definitivamente, esta acción no casa mucho con el ideal de Podemos.