Telecinco no va mal en audiencias pero sigue la dura pugna con Atresmedia por liderar las audiencias de la televisión en España. Uno de los huesos más duros, si no el que más, sigue siendo el concurso ‘Pasapalabra’, y más con el agravante de que pertenecía a Mediaset pero la sentencia del Tribunal Supremo le obligó a renunciar. Atresmedia no tardó en llegar a un acuerdo para emitir el formato británico en Antena 3, volviendo a la casa de origen, cuando lo presentaba Silvia Jato. Veamos qué plan tiene pensado Telecinco para tomarse la revancha y la venganza.
La franja horaria donde ‘Pasapalabra’ es amo y señor

El concurso que presenta en Antena 3 Roberto Leal se emite de lunes a viernes de 20:00 a 21:05 horas. Hasta hace poco tenía en principio una dura competencia con el ‘Sálvame Tomate’, y así ha sido, pero sin desbancar nunca a ‘Pasapalabra’. Y eso que el ‘Tomate’ tenía unas buenas cifras con más de un 16% de audiencia y más de 2.100.000 espectadores.
Sin embargo, a Mediaset no le basta con estar cerca sino que quiere superar a ‘Pasapalabra’. Para ello optó por apostar por otro concurso y además un clásico del género: ‘El precio justo’ y presentado por el carisma de Carlos Sobera. Pero hasta ahora no ha funcionado bien y lo han trasladado a Cuatro, ya que ni se acercaba no ya a ‘Pasapalabra’, sino a las cifras del ‘Tomate’. Ahora con la Eurocopa todo se ha trastocado hasta mediados de julio, que acaba.
La floja vuelta del ‘Tomate’

Con el paso de ‘El precio justo’ a Cuatro y la vuelta del ‘Tomate’ a las 20:00 horas se esperaba que volvieran los datos anteriores al menos, y más aún al ser una versión reducida por la conexión con la Eurocopa a las 20:30 horas. Pero los datos han sido muy pobres, con un 15.5% de cuota de pantalla y sin llegar al millón y medio de espectadores en seis tardes.
Telecinco pensaba que la mezcla en esa hora de cotilleo y fútbol era perfecta para liderar esa franja horaria por fin, pero ha sido todo lo contrario. Es cierto que el mando de esta hora lo tenía hasta hace unos meses Telecinco, pero desde que ‘Pasapalabra’ se ha puesto por delante, parece imposible ni acercarse. ¿Qué puede o tiene planeado hacer Telecinco al respecto?
El plan A para superar a ‘Pasapalabra’
Así las cosas, Telecinco baraja sobre todo dos opciones tras la finalización de la Eurocopa y por tanto recuperado ya la parrilla habitual de la cadena, pero sobre todo de cara al septiembre, que es el inicio de la temporada televisiva fuerte. Mucho tendrá que subir en audiencia en el espacio que ocupe en Telecinco la franja de las 20:00 a las 21:05 horas, porque el listón de ‘Pasapalabra’ ahora es muy alto gracias a los duelos entre Pablo Díaz y Javier Dávila, rozando siempre el Rosco y el fabuloso bote que hay. Hablamos de entre 2,5 y 3 millones de espectadores. Como vemos a veces el doble de la audiencia de ‘Sálvame Tomate’ ahora.
Sin embargo, el plan A sigue siendo apostar por el ‘Tomate’, que volvería a su ser entre las 20:00 y las 21:05 horas, como ‘Pasapalabra’. Van ya casi 300 emisiones y en Mediaset creen que puede ponerle las cosas difíciles al concurso que presenta Roberto Leal. Sobre todo teniendo en cuenta que tarde o temprano Pablo o Javier ganarán el Rosco millonario y habrá una época de menor interés y tensión. Pero tienen un plan B, y tampoco es muy original como vamos a ver.
El poco original e ilusionante plan B

Lo que denota que Telecinco no ve que ningún otro tipo de programa pueda competir o acercarse a ‘Pasapalabra’ más de lo que lo ha hecho el ‘Tomate’… y parece que ‘El precio justo’, aunque no llegaban ni por asomo al espacio rosa. Si, el plan B que no se descarta es el de recuperar el concurso que presenta Sobera en la franja de ‘Pasapalabra’ y darle una nueva oportunidad, pensando que un espacio tan mítico puede volver a ser líder de audiencia con paciencia. Sin embargo, parece una opción poco probable.
Habría un hipotético plan C, y decimos hipotético porque no está ni pensado ni planificado, aunque se trataría de la única otra salida que hay: encontrar un formato nuevo y fresco con el que dar con la tecla y conseguir de nuevo liderar esa franja de prime time tan codiciada. El problema es que dos géneros tan infalibles como el corazón y el concurso no han logrado aún el objetivo, y más en una franja donde no suele funcionar mejor otra cosa.
‘Pasapalabra’, firme a pesar de las polémicas

Y eso que el programa presentado por Roberto Leal ha estado varias veces en el ojo del huracán por el motivo de siempre: los dichosos roscos. Los internautas incluso han amenazado con boicotear al concurso y dejar de verlo más de una vez por lo extraño de ciertos roscos, donde parece que se va alargando todo para acumular más bote y dar más emoción, o bien se vislumbra a quién se lo «darán».
Todos daban por ganador del bote de ‘Pasapalabra’ a Pablo Díaz, que era cuestión de tiempo que se lo llevara y que incluso estaba todo preparado para ello. Pero las cosas han cambiado y ahora nadie descarta un desenlace inesperado. Pablo desde luego está resuelto a ganar el fabuloso bote histórico pero, como siempre en los concursos, hay sospechas por parte de la audiencia. Aun así, esos llamamientos a dejar de verlo parece que no surten mucho efecto, a tenor de los datos. O bien son palabras vacías de los seguidores que al día siguiente se vuelven a enganchar.
El concurso responde

Pero en general, a la audiencia de ‘Pasapalabra’ no le crispa las posibles irregularidades, que la mayoría no cree, sino la desesperante dificultad del rosco final. Tanto es así que su guionista, Borja Pérez, ha tenido que hacer unas declaraciones en la radio para tratar de calmar los rumores: “Los roscos empiezan con el departamento de guion. Hay cuatro guionistas que son los que eligen las 25 palabras que van en cada uno de los roscos de cada concursante. Para elegirlas, hay libertad. Al final, lo que importa es que, al rededor de 20 palabras sean más o menos fáciles, sacables o que todo el mundo conocemos. Luego hay tres o cuatro palabras que son difíciles y son las que marcan la diferencia entre quién gana el programa y, sobre todo, entre quién se lleva el bote. Cuando se elaboran los roscos no se hacen pensando en un concursante. Cuando se escribe no sabemos tampoco a quién le toca cada uno. El rosco es adjudicado por la dirección del programa.“
Así lo expresaba ante los micrófonos de la Cope, además de asegurar que las letras como la J, N, o la Z tienen menos palabras en el diccionario, por lo que son las que más veces se tienen que repetir. También destaca que siempre usan como fuente el diccionario de la RAE, el de María Moliner, y a veces también de enciclopedias.