Siguen las novedades en la automoción y movilidad, con la nueva Ley de Tráfico como protagonista. Nuevas medidas, leyes, restricciones, elementos tecnológicos obligatorios, medios de vigilancia y multa, etc. Pero también hay, en aras de la lógica obsesión por la seguridad en los vehículos y de los conductores pasajeros, nuevas obligaciones en forma de sistemas de ayudas que tendrán que incorporar todos los nuevos vehículos fabricados a partir de ahora, concretamente desde el 6 de julio.
Así que si compras un nuevo coche desde ya, podrás disfrutar de más seguridad para tu conducción y seguir evitando también desde el frente tecnológico, accidentes y sobre todo muertos y heridos. Son los llamados ADAS o sistemas avanzados de ayuda al conductor. Vamos a verlo pormenorizadamente.
LA TECNOLOGÍA AL SERVICIO DE LA SEGURIDAD
Es una auténtica revolución tecnológica en todos los órdenes. Nos rodea, en algunos casos para mal, pero en la mayoría para bien. Y si es en pos de nuestra seguridad y conservación de la vida, bienvenida sea. Aunque a muchos les puede molestar, porque ocurre eso que tanto temen los más desconfiados con la tecnología: reducir la influencia y acción humana.
Es el caso de estos ADAS. Buscan minimizar la influencia humana, pero es irrefutable que causa el 90% de los siniestros con víctimas. Es lógico además aprovechar la tecnología, ya que va muy por delante de la legislación.
VARIOS NUEVOS SISTEMAS DE AYUDAS
Se quiere generalizar o al menos acercarse a datos como el de modelos compactos tipo Seat León o Citroën C4, que llevan entre 20 y 30 de estos elementos de seguridad. Pues bien, se ha conseguido que al menos ocho de ellos sean obligatorios, gracias a la UE, que ha establecido esas nuevas normas de homologación.
¿Qué pasa los que están ya a la venta o sin fabricar? Pues que, ya homologados o no, tendrán que esperar a julio de 2024 para sumarse a esto. Obviamente, no se obligará a instalar estas ayudas electrónicas en automóviles ya en circulación.
EL MÁS COMÚN A PARTIR DE AHORA ENTRE LOS SISTEMAS DE AYUDAS
Hablamos de asistente inteligente de velocidad, que ya será tan común como el ABS en los frenos. El sistema consta de una cámara colocada en el frontal, mejor si se combina con la información del GPS, para que el automóvil sepa a qué velocidad tenemos que ir en cada tramo.
Con ello nuestro vehículo adaptará de forma continua nuestro ritmo al de las señales, usando para ello el control de crucero. Sin embargo, se permitirá que el usuario lo pueda desactivar si actúa erróneamente o necesita acelerar de forma urgente, en cuyo caso habrá que pisar con violencia el pedal para romper esa resistencia. Veamos los otros siete…
CÁMARA TRASERA CON DETECCIÓN DE TRÁFICO CRUZADO
Muchos modelos ya lo tienen y los conductores ya habrá visto que, si es útil a la hora de aparcar sin darle un rasponazo al coche, lo es mucho más cuando se trata de salir marcha atrás de una zona con poca visibilidad, como un aparcamiento en batería: el gran angular que llevan nos muestra muchas cosas ocultas. Puede ser vital.
Lo que quiere Bruselas es que, además de mostrar imágenes, el software rastree los laterales buscando otros vehículos, ciclistas o peatones con los que podemos colisionar. En la pantalla, una señal de peligro nos avisará desde qué lado llega y, en caso de que no frenemos, el coche lo hará por sí solo.
DETECTAR TU FATIGA Y SUEÑO
Cuántos accidentes han sido causa de agotamiento o somnolencia. Se recomiendo hacer una parada cada dos horas o 200 km pero no siempre se cumple. Por eso mejor que la tecnología lo haga. Basta un simple control de nuestro manoteo sobre el volante para que el coche intuya que llevamos demasiado tiempo conduciendo, pues cometemos imprecisiones de forma continua y corregimos con brusquedad.
En una primera fase, el dispositivo nos advertirá de que estamos fatigados o somnolientos y, en una evolución posterior, será capaz de avisar de una distracción. Para ello, necesitará de cámaras de reconocimiento facial que, por la protección de datos, no podrán almacenar las imágenes.
OTRO DE LOS SISTEMAS DE AYUDAS ÚTILES: LA FRENADA DE EMERGENCIA
Está ya exigido por EuroNCAP, para lograr la máxima valoración en sus pruebas. Logra que el automóvil se detenga, o frene al máximo, ante un posible choque con otro vehículo parado o en movimiento. En una segunda fase (coches matriculados desde 2026), deberá reconocer a peatones y ciclistas. Además, en las detenciones muy bruscas, se activarán los intermitentes de emergencia.
Este tipo de elementos nacieron para evitar colisiones por alcance y atropellos en ciudad, pero ya los hay que son eficaces a velocidades muy altas. Su interés también responde a que muchos usuarios, en una emergencia, o no frenan con la fuerza necesaria o dejan de hacerlo antes de tiempo.
ALERTA DE CAMBIO INVOLUNTARIO DE CARRIL
Va en la línea del agotamiento o somnolencia que vimos antes. Lo primero que ocurre es variar la dirección, invadiendo la línea o el carril. Con este sistema el automóvil lee a través de una cámara la señalización de la carretera y si nos salimos del carril sin activar el intermitente, entiende que nos estamos despistando, avisando de ello de forma sonora, visual o mediante vibraciones en volante o asiento.
En sus versiones más avanzadas, estos dispositivos intervienen sobre el volante para corregir la trayectoria y puede tomar el control total si el conductor ha sufrido una indisposición o no responde. Pero como pueden fallar o no leer bien la carretera, se permitirá su desconexión. De hecho, en algunos coches actuales su actuación es muy intrusiva y violenta.
SI BEBES, NO LO ARRANCAS
Así de simple. El coche ya decide por ti, y te puede salvar la vida. Ya hace años este sistema de ayuda que impide arrancar el vehículo si tienes cierta dosis de alcohol en sangre existe, como por ejemplo en modelos de Volvo.
Pero lo que la UE obliga a llevar en los automóviles no es ese aparato, sino la interfaz que permita instalarlo y que cumpla su función. Y es que el alcohol está detrás del 25% de las muertes en accidente que se producen cada año en la UE. En España, estos dispositivos sí deberán ser instalados en los vehículos de transporte de pasajeros desde julio, tal y como recoge la reforma de la Ley de Tráfico que entró en vigor el 21 de marzo.
AVISO DE CINTURÓN EN LA PARTE TRASERA
Sería el séptimo entre los sistemas de ayudas (al final veremos el octavo y más sorprendente). El avisador en los asientos delanteros es ya veterano, ya que existe desde 2004 de forma obligatoria. Por fin será necesario también en los traseros. Pasados unos metros o superada cierta velocidad, un pitido nos avisará (hasta hacerse casi insoportable) de que hay infractores a bordo. Si son adultos, la multa (200 euros) la pagarán ellos. Si son menores, el conductor.
Puede parecer un problema menor, pero con este dato no te lo parecerá: En una colisión frontal a sólo 60 km/h, un ocupante trasero sin cinturón sale disparado contra los de delante como si pesara 56 veces más: es decir, que una persona de 75 kilos es proyectada como si pasara de las cuatro toneladas, lo mismo que un elefante.
EL OBJETIVO INMEDIATO…
Con ello la UE espera evitar 25.000 muertes y más de 140.000 heridos graves hasta 2040. De todas formas, cada cinco años se realizará una valoración para ver la incidencia y éxito o no de las medidas, que también llegarán a furgonetas y camiones a partir del 2028.
Pero muchos de estos elementos ya están en algunos modelos comercializados, fruto de la competitividad en marcas en seguridad, un elemento cada vez más buscado por los compradores, por encima de otras consideraciones que antes eran más prioritarias: potencia o confortabilidad, por ejemplo.
…Y FINAL
La Dirección General de Tráfico no para, camino de su aún más ambiciosa meta de reducir los accidentes mortales a casi cero, y que no haya ya muertes para el 2050. Pero no basta con concienciar a los conductores, sino hacer uso de la tecnología y herramientas adecuadas, como estamos viendo. Por eso no sólo aplican lo último en ellos mismos (nuevos radares ultra sensibles, drones, aplicaciones…), sino en el vehículo. Hay uno que igual se te viene a la cabeza y que sin embargo no está presente aún en ningún modelo: la caja negra, tan obligada en los aparato aéreos, y que será el octavo elemento obligatorio como sistemas de ayudas.