‘Gran Hermano’ revolucionó para siempre nuestra televisión en la primavera del año 2000. Telecinco estrenaba este «experimento sociológico» que se convertiría en el mayor éxito de la cadena en sus diez años de vida. El concurso presentado por Mercedes Milá concluyó con el triunfo de Ismael Beiro, en una final que fue seguida por el 70,8% de la audiencia. Brutal.
Desde entonces Mediaset exprimió el género de los realities, que se convirtieron en motor y fruto de sinergias que provocaron el aumento de audiencia de su parrilla al completo. Pero este otoño ‘Gran Hermano’ ha cerrado una etapa con su edición ‘Revolution’, que contó con tan solo 14 galas, 11 menos que hace apenas cinco años. Jorge Javier Vázquez fue el encargado de cerrar esta etapa con una edición que fue seguida por menos de millón y medio de espectadores de media con un 15% de share, trece puntos menos que hace trece años y con noches en las que llegó a convertirse en cuarta opción del prime-time.
Semejante desgaste conllevó que el presentador admitiera su parte de culpa: «Mañana finaliza ‘GH Revolution’. En cuanto a audiencia, ha sido la peor edición de todas las que se han emitido. Creo que todavía es pronto para evaluar el porqué, pero estoy convencido de que mi labor como presentador ha ayudado a que no cuajara. Gracias a todos los que estuvieron ahí y mis disculpas a los que piensan que no estuve a la altura. No sé cuánto porcentaje de responsabilidad me toca, pero sería de idiotas pensar que no tengo nada que ver con los bajos datos«.
Unos bajos datos que han tenido una consecuencia directa: la cancelación de ‘Gran Hermano VIP’, tal y como adelantó Merca2 en septiembre. Tampoco ayudó que la quinta edición del formato con celebrities cerró su etapa como la edición menos vista de la historia con apenas 2 millones de seguidores, la mitad que los que logró la edición ganada por Belén Esteban.
Sí que hay confianza en Mediaset con ‘Supervivientes’, que podría adelantar su inicio a marzo tras haber logrado el año pasado casi tres millones de espectadores y un 26,4% de share, números que podrían mantenerse de la mano de concursantes como Gustavo González. Estos números contrastan con los realities de Cuatro, que tampoco pasan por su mejor momento: este otoño ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’ ha cerrado su edición menos vista con un 8,1% de share, lo que supone una caída de 4,5 puntos respecto a la anterior aventura «tróspida». ‘Granjero busca esposa’ tampoco ha sido capaz de mejorar los números de su antecesor y tiene serias dificultades para alcanzar siquiera el 7% de share.
En TVE sin embargo los realities se han convertido en el motor de la cadena pública: ‘MasterChef Celebrity’ fue el reality-show más seguido de este otoño con 2,7 millones de seguidores y un 23,5% de share, su edición junior lidera en las Navidades y el formato con anónimos estrenará su sexta edición en 2018 tras haber concluido la de 2017 como reality-show más visto del año con 3.260.000 espectadores de media.
También se ha saldado de forma positiva el regreso de ‘Operación Triunfo’, que ronda el 18% de share tras haber despertado el fenómeno fan con entusiasmo de crítica y público en las redes sociales. Estos resultados han provocado que TVE prepare de la mano de los productores de ‘MasterChef’ uno de sus estrenos más ambiciosos de este nuevo año: ‘Maestros de la costura’, mientras que Atresmedia apostará por nuevas ediciones de ‘Casados a primera vista’, en Antena 3, y ‘La Isla’, que contará con una edición femenina en La Sexta.