Estos días estamos conociendo el escándalo de las escuchas ilegales en el BBVA. La duda que está en el aire es ¿fue una actitud deshonesta del equipo de seguridad, o Francisco González estaba al tanto?
Hoy despejamos esa incógnita.
Una charla de 30 minutos es la prueba definitiva del presunto espionaje perpetrado en 2005 por el presidente de honor del BBVA, Francisco González, contra su «grupo hostil» y financiado con el dinero que los accionistas ponían en sus manos para gestionar el banco.
La grabación, registrada en una cafetería de El Corte Inglés, tiene dos interlocutores: el comisario José Manuel Villarejo, preso por diversas acusaciones como extorsión o espionaje; y el entonces jefe de seguridad del BBVA, Julio Corrochano. La voz de Villarejo a estas alturas es inconfundible y la de Corrochano ha sido reconocida para MONCLOA.COM por los antiguos compañeros de este exjefe provincial de Madrid y ex comisario general de Policía Judicial.
No sólo la voz delata a Corrochano: también su currículo. Le recuerda a Villarejo que precisamente por su paso por tales cargos policiales, donde leía cientos de informes, sabe distinguir el oro de la paja de los informes que quincenalmente le entregaba su interlocutor. Ningún otro cargo del BBVA tenía tal historial.
Lo que ignoraba Corrochano es que la conversación de espías que mantiene la estaba grabando su amigo y cliente Villarejo. Porque una de las virtudes de este pretendido agente encubierto, que ofrecía sus servicios a medio Ibex 35, es que grababa todas sus charlas. Por si un día esa grabación cobraba valor o permitía refrescar la memoria en caso de deslealtad.
Corrochano no sólo evidencia su papel en esta guerra sucia del BBVA. También deja al desnudo en la grabación a los jefes de esta operativa presuntamente ilegal: dice que trabaja directamente para el presidente (Francisco González), que su director es Ángel (Ángel Cano, consejero responsable de la Seguridad en el BBVA), que él preparará la factura para Villarejo, y que comparte sus informes de espionaje con dichos cargos del BBVA.
Lo que dice Corrochano y graba Villarejo coincide con la abundante documentación en poder de este diario. Resulta que todos los informes que realiza Villarejo para el BBVA están ejecutados según las órdenes emitidas por ‘Tommy’, el alias de Corrochano en círculos policiales. Y las grabaciones realizadas por Villarejo sobre el jefe de Seguridad del BBVA están identificadas como ‘Tommy’.
GONZÁLEZ ENDOSA A CORROCHANO LA RESPONSABILIDAD
Corrochano dice en la grabación que preparará la factura de Villarejo y, casualmente, este diario posee borradores de los contratos que enuncia. Y Francisco González, en reciente entrevista, ha endosado a Corrochano precisamente la responsabilidad de los pagos a Villarejo: «Lo hace el departamento de seguridad con normas muy estrictas».
FG deja tirado a su exjefe de seguridad: «Me entero cuando aparece la primera noticia hace unos meses. Yo sabía que el banco llevaba a cabo trabajos de inteligencia para defenderse. Hasta donde sé, se han hecho las cosas como hay que hacerlas» -declaró hace unos días a El Pais Semanal-.
Pero en esta grabación, Julio Corrochano desmiente al presidente de honor del BBVA. FG no sólo estaba al corriente de los informes que realiza Villarejo en 2005 contra sus enemigos, por tanto sabía ya entonces de su contratación, sino que le pedía menos información pública y más munición propia del espionaje que le estaba pagando tan generosamente. FG quería secretos de sus enemigos a cualquier precio, a tenor de su jefe de seguridad.
LAS GRABACIONES DEMUESTRAN QUE EL RECEPTOR FINAL DE LOS INFORMES ERA FRANCISCO GONZÁLEZ
Corrochano no tiene reparos en advertirle a Villarejo de que el 80% de los informes y avances que le traslada están sacados de Internet y el comisario se defiende que hay algunas claves, como la «reacción virulenta» del Banco de Italia, que fue adelantada al banco de FG.
Villarejo le habla de pinchazos ilegales en una guerra empresarial en Italia cuyo eje es Silvio Berlusconi…y Corrochano lejos de poner distancia por cuestiones éticas o legales le dispara una sola pregunta: «¿Tenéis la cinta?». Tampoco hace ascos a pruebas para desacreditar a un alto cargo de Endesa:
Villarejo: Luego otro tema que a lo mejor interesa a tu señorito, me han contado que estos días lo quería hacer también Montilla (entonces ministro de Industria) una documentación que ha encontrado o que alguien le ha dado de Chile contra el de Endesa…
Corrochano: ¿Y eso quién lo tiene?
V: Eso se lo han dado a Montilla y está tanteando a qué periodista se lo filtrar. Voy a ver si me hago con una fotocopia …
C: Eso nos interesa porque el señorito se lo pasa a.…
A continuación, Corrochano bendice que Villarejo haga seguimientos en la calle de los enemigos de FG. Uno de ellos es Jesús María Caínzos, que había sido vicepresidente del BBVA hasta que González le destituyó en 2003:
Corrochano: Oye, he estado viendo lo otro…
Villarejo: ¿Lo de las biografías?
C: Lo de las biografías. Caínzos, ¿tenéis constatado que vive en Serrano? Si vive en La Moraleja, macho.
V: No, tiene un domicilio ahí en Serrano. Le hemos…
Corrochano: ¿Pero cuándo le han seguido, de dónde ha salido?
Villarejo: Le hemos seguido y casi siempre ha salido de una oficina, que no me acuerdo ahora dónde está.
C: Sí, hay ahí una oficina, que está ahí por (..).
V: Y tiene un domicilio en Serrano también, que en alguna ocasión se le ha seguido y ha ido allí.
C: Pero donde tiene a la familia y todo el rollo es en la Moraleja.
V: Bueno, pero se ha rastreado.
Tanto Villarejo como Corrochano coinciden en que es «un momento dulce» para el BBVA, después de constatar cómo Miguel Sebastián, uno de los líderes del llamada ‘grupo hostil’, está «jodido» por las dificultades de Sacyr para que la operación prospere.
Además, el jefe de la Oficina Económica está «paranoico», en palabras del comisario, ante su obsesión de que le estén siguiendo y cree que «la gente del PSOE le está traicionando» ya que hay socialistas que están «ayudando al señorito FG.
La prueba de quién era el destinatario final del trabajo llega a continuación, cuando el jefe de Seguridad del BBVA urge a Villarejo para que le avance «bombas» contra los rivales del presidente y así él poder elevarlas a FG: «Sobre todo para cuando me llamen, porque me llama cada diez o quince días el presi. Para tener yo tres o cuatro historias preparadas, que vean que estamos…».
Corrochano: Vete dándome.
Villarejo: Si, te quería dar
Corrochano: En diez o quince días…
Villarejo: …un ‘avancito’ de cuatro
C: …de cuatro cosas
V: Por ejemplo…
C: …para ir a ver a mi jefe.
V: Por ejemplo, el Montilla (ministro de Industria en aquel momento).
C: Sobre todo para cuando me llame, porque me llama cada 10 o 15 días el presi… Tener yo, las tres o cuatro historias y dárselas.
V: Preparadas.
Pero el lenguaje del hampa alcanza su cima cuando ambos comisarios abordan de nuevo a su objetivo preferente: el exministro Miguel Sebastián, quien dirigía la Oficina Económica en Presidencia de Gobierno. Es más, aluden a una persona allegada a él.
Villarejo: También estamos mirando lo del mariquita de los cojones. Le estamos ofreciendo una pasta para que el cabrón se deje, estamos haciendo un paripé de ir a un programa de la tele a ver qué estaría dispuesto a decir…
Corrochano: Hoy le suspenden a Sebastián en el ABC los analistas económicos, como 300 analistas económicos, por el programa que ha hecho, que es una puta mierda. Ahora debe estar muy jodido. Ahora está muy pegado. Es un momento dulce.
«También estamos mirando lo del mariquita de los cojones. Le estamos ofreciendo una pasta para que el cabrón se deje»
V: Psicológicamente a todos les ha jodido. Y como es muy paranoico… Él está obsesionado con que todavía lo están siguiendo, y lo que está comentando en su entorno es que gente del PSOE lo está traicionando. Que ha habido gente del PSOE que ha ayudado al señorito FG, que, si no, no era posible que alguien pudiera pinchar los canutos o seguirlo y que hay una parte del partido que lo quiere echar. Y con esa paranoia está todavía. Con lo cual eso viene de puta madre, ¿no?
Las frases brutales sobre Sebastián se suceden. Y lo que es peor. Apuntan que conocen sus mensajes o llamadas de teléfono. MONCLOA.COM obvia las identidades de las supuestas parejas de Miguel Sebastián que identifican Corrochano y Villarejo para proteger la intimidad del exministro y de los aludidos:
Villarejo: Luego el tema del gilipollas éste del Cainzos y …la del mariquita del (xxx) que voy a tenerle que dar yo un puntazo que tiene cojones macho…Pero coincido con tu apreciación de que estaba el tío depre, está medio depre, no anda con buenas relaciones con el novio…
Corrochano: Y le ves las fotos y las hostias…
V: Está mustio (Sebastián). No me extrañaría que esas llamadas y esos mensajes… Debe ser jodido ¿eh? Ahí no llamas y mandando mensajes y el otro tiene que explicarle…Y claro, yo no sé si fue este o no…Yo tengo mis dudas. Igual se lo va a comer (xxx) porque el tío tuvo varios meses de pelea con él. Hay varios periodistas económicos, todos del PSOE catalán que son uña y carne de entorno de Sebastián. Comí con uno de ellos…Hablan del (xxx) macho, como si fuera… Que no es (xxx), es (xxx)… Le quieren mucho.
C: Por eso la corrección porque yo soy españolista…
V: Hablan que es una pena que es una pareja muy tal, que después de dejarlo con el otro, con la anterior pareja de él. Joder, (xxx), cómo se llama, (xxx). Ellos con la mayor naturalidad del mundo dicen la relación con (xxx) fue muy atormentada… Y yo claro, yo “desde luego hay que ver”… Estos dos periodistas, ahora me doy cuenta, son un poco jibias…porque hablan en un tono. Yo me hice entrañable pero no tengo yo mucho aspecto de tal pero “yo no entiendo que hayan tenido que pasar tantos años para lo del matrimonio entre personas del mismo sexo porque eso de homosexual no les gusta”….
«BUENO, MI PRESIDENTE NI LAS CONCLUSIONES LEE… HAY QUE DECIRLE PIM, PIM, PIM Y PIM»
Del capítulo Sebastián, evidenciado por la grabación, saltan dos conclusiones: Villarejo y BBVA no sólo espían la vida sexual del exministro, quieren usarla y manipularla, hasta el punto de querer sobornar a un ex amante del exministro y pasearlo por los platós. Porque el fin no es sólo conocer los movimientos del rival de FG. El fin es desacreditarlo, tocarlo y hundirlo.
Tras algún análisis de altura más de Villarejo, como que la homosexualidad está muy extendida entre los periodistas económicos, ambos llegan al punto crucial, el pago del BBVA a su cliente:
Corrochano: El día 1, perdón, preparamos la factura.
Villarejo: Ah, sí, sí. Claro, claro, preparamos adecuadamente.
C: Pues, el informe, ¿cuándo?
V: El informe, vamos, debe estar ya hecho. Lo que pasa es que estoy con los últimos retoques porque…
C: Para… el jefe…
Pero el entonces presidente del BBVA no quería cualquier cosa de Villarejo y se quejaba de sus informes, según le explicó Corrochano: «No, yo no sé escribir, pero sí estoy acostumbrado a separar la paja de la chicha…(…) Y eso lo leen… Vamos a ver, un comentario que me hizo el presidente al principio, que escribes mucho de oído, como diciendo de internet…»
Corrochano le insistirá en este punto: «Por eso te decía yo en tema de conclusiones, aunque haya una parte de literatura y tal, que hay gente que le gusta el cine, no tiene tiempo para eso. Yo no, y mi presidente, nada. Bueno, mi presidente ni las conclusiones lee… Hay que decirle pim, pim, pim y pim».
El BBVA, por boca de Corrochano, detallaba lo que sus jefes querían de Villarejo: «Acciones agresivas y desestabilizadores que han permitido con seguridad cambiar…Pam, pam, pam, pam y además adjuntas… lo que salió en tal periódico. La reunión que tuvo este tío en Zurich con fulano con mengano mengano y mengano. Que se pasó información puntual. Eso metido en una novela es difícil sonsacarlo pero… dices joder ha hecho el trabajo. Esa línea yo creo que es lo más acertado. Que además Ángel (Cano), mi director, lo ve así también…».
El desarrollo de la charla entre Villarejo y Corrochano permite aclarar cuáles son las acciones agresivas que el BBVA le exigen al comisario encubierto y que acaban bordeando o atravesando la legalidad. Villarejo le promete a su interlocutor un dato «sobre el italiano» y el jefe de Seguridad del BBVA se despide como se hace con un amigo: «De acuerdo, venga, un abrazo».
ASÍ SE PINCHABAN LOS TELÉFONOS PARA EL BBVA
Las carpetas de documentos de trabajo del equipo del comisario Villarejo para el BBVA desvelan que éste adquirió un equipo de intercepción de llamadas de teléfono. Varias conversaciones transcritas en estos informes confirman el acceso de los servicios de espionaje de Villarejo a este tipo de herramientas. En la documentación a la que ha tenido acceso MONCLOA.COM aparecen incluso las gestiones para la compra de esta herramienta, llamada ITC y que en la jerga se conoce como “la maleta”. Estos dispositivos son ilegales en España. Fuentes de los servicios secretos han informado a este diario que el precio en el mercado clandestino de este tipo de dispositivos ronda los 500.000 euros.
Esta documentación aparece en una carpeta llamada “Gestiones”. Los documentos fechados en enero de 2005, llevan la denominación común de BIG. BIG es como Villarejo llamaba al comisario Enrique García Castaño, alias ‘El Gordo’, jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo de la Policía, es decir, el jefe de la unidad que se encarga de dispositivos electrónicos de espionaje como balizas de seguimiento o interceptadores de llamadas. A García Castaño se le tiene como el máximo experto de la policía en este tipo de dispositivos, ya que ha pasado más de una década al mando de esta unidad, decisiva en operaciones antiterroristas y contra la delincuencia organizada, que ya es la que dota de medios tecnológicos a las unidades de investigación.
En los informes se detalla que dos equipos electrónicos fueron averiados por La Moncloa mientras trataban de “pinchar” el móvil de Miguel Sebastián.
En la conversación transcrita entre Miguel Sebastián, la entonces vicepresidenta Fernández de la Vega y un directivo del Santander aparece una nota final en la que se explica que se ha tenido que interrumpir la intercepción de la llamada por temor a ser descubiertos. Del mismo modo, en otros documentos el equipo de Villarejo detalla que sus dispositivos electrónicos de intervención de llamadas han sido averiados por las contramedidas electrónicas de los servicios de seguridad de la Presidencia del Gobierno, cuando se trataba de controlar el teléfono móvil de Miguel Sebastián, entonces jefe de la Oficina Económica de Zapatero. Detalla que dos equipos electrónicos fueron averiados por La Moncloa mientras trataban de “pinchar” el móvil de Sebastián.
La “maleta” o ITC es un dispositivo que se suele utilizar embarcado en un vehículo, que en realidad actúa como una antena de telefonía. Los móviles del área bajo su influencia se conectan a esta antena como si fuera de una compañía de teléfonos convencional. Es cuando se consigue interceptar la llamada. También es utilizado para descubrir el móvil que usa la persona investigada, que puede no estar a su nombre.
En el documento Big-Maleta 4-1-05 Villarejo detalla la empresa a las que estudia adquirir el ITC. Se trata de la compañía Retemsa. La nota dice textualmente: “Otro posible contacto para adquirir el ICT, es una empresa llamada RETEMSA (al parecer amigos de RALI). Figra (sic) como HARRY 1.0. Contactaron el 4.6.03 Oferta JHR030604-47”.
A esta nota acompaña una detallada ficha sobre la empresa, radicada en Leganés (Madrid) y sus posibilidades tecnológicas. Esta empresa, detalla el informe, pertenece al Grupo SIA. SE trata de un grupo de compañías de alta tecnología creado en 1989, que se define como suministradora de “servicios y soluciones en el área de informática corporativa”. Esto quiere decir todo tipo de infraestructuras de seguridad, comunicaciones y firma electrónica. De hecho, en el informe “Big-Maleta 4-1-05” se explicita que “La División de Seguridad de Lógica de la empresa de redes de Telefonía Móvil SA (Retemsa) ha sido adjudicataria del suministro de equipos gestores de claves para el Piloto de Firma Electrónica de la Red de propósito General del Ministerio de Defensa”.
En un informe sucesivo, llamado “Big-Maleta 4-1-05ª”, se detallan las gestiones previas de compra de este dispositivo, que se hacen de forma clandestina y con fuertes medidas de seguridad, en “abril-mayo de 2004”. Según se explica con detalle, el encuentro tuvo lugar en un hotel de Majadahonda (Madrid). El equipo de Villarejo explica que se presentaron dos individuos para la negociación, a los que fotografían (“hay foto digital de los dos” especifica el informe). El equipo de Villarejo que va a la negociación localiza también el vehículo en que acuden los vendedores, un Mercedes que según ellos está a nombre de la empresa Poligon. A continuación, se refiere el nombre del administrador de esta compañía, Antonio de la Piedra, del que se rastrean el resto de sus cargos societarios. No obstante, a pie del informe se aclara que “ninguno de los que aparecen en la foto es Antonio de la Piedra”.
Pero el propósito de adquirir los maletines es firme. Ya en un informe fechado el 22 de diciembre de 2004, llamado “Blas-Gest”, aparecen las siguientes anotaciones: “Saber el nombre del comprador de la “máquina”. Oficina de Kroll en Madrid y nombre del responsable. Control TC empresas (catálogo, si es CIFRA u otro representante, precio…) Tfno. de BASALTE – Paris (preguntar nuevo precio…, también opción israelí). Tfno. pedido con urgencia por Ant.As. Sociedades de Andorra de BB (parece ser que había dos)”.
A principio del informe aparece la siguiente nota: “Mirar posibilidad de teléfonos (sic) Sociedades Andorra, Suiza…” A continuación, un listado con los nombres y datos personales (domicilio y números de teléfono fijos y móviles personales) de Miguel Sebastián, Luis del Rivero, Juan María Aguirre Gonzalo, Juan Abelló, su esposa Ana Gamazo, Carlos Arenillas y Carlos Loring Martínez de Irujo.
Otro informe, datado el 17 de enero de 2005, en la misma carpeta llamada “Gestiones”, refleja los intentos del control de las comunicaciones y un posible contacto con la agencia Kroll. Bajo el epígrafe “CC Ratreo” (CC es control de comunicaciones en las claves de Villarejo), aparece el siguiente listado:
Potavoz (sic)
Personal BB
DONATO
BENI
ARENI
Contacto FELIX
Datos de Kroll
El espionaje de llamadas del equipo montado por Villarejo para el BBVA se basaba en la identificación de titulares, el análisis de las llamadas entre ellos y a terceros, y finalmente en la interceptación de algunas llamadas, lo que se conoce como “pinchazos”. En estos figuraría la interceptada de un teléfono de la Presidencia del Gobierno entre Sebastián, De La Vega y el directivo del Banco de Santander.
El alto precio de este tipo de dispositivos electrónicos, medio millón de euros, plantea dudas sobre quién pagó este material. Según los datos obtenidos hasta ahora por MONCLOA.COM, el equipo montado por Villarejo cobró en torno a esos 500.000 euros al BBVA. Por lo tanto, parece difícil que esta compra de material haya sido sufragada por el mismo Villarejo.