España se encuentra entre los países de la zona euro que menos notarán el envejecimiento en el porcentaje de gasto público respecto al producto interior bruto (PIB), según se desprende de un ‘paper’ elaborado por el Banco Central Europeo (BCE) en el que analiza el impacto macroeconómico y fiscal del envejecimiento de la población en los Diecinueve.
A nivel general, y en referencia al conjunto de la eurozona, el BCE considera que son necesarias reformas de las pensiones para «animar» a los trabajadores a posponer su jubilación. Además, también ha instado a los gobiernos a pensar en «incentivos» para elevar la inmigración de trabajadores y asegurar su integración en el mercado laboral.
Los cálculos de Eurostat suponen que para 2070, la población de los Diecinueve será un 3,5% menor que en 2020. Esto implica que la tasa de dependencia se incrementará en un 54% durante el próximo medio siglo. Para 2070, en el conjunto de la eurozona habrá dos trabajadores por pensionista, frente a los tres actuales.
Con respecto a los costes fiscales, el BCE ha indicado que el gasto público actual relacionado con el envejecimiento (pensiones, sanitarios, dependencia, etc) fue del 24,6% del PIB en 2019. Para 2040, con la jubilación de la generación del ‘baby boom’, la tasa crecerá hasta el 27%. Sin embargo, para 2070 la ratio se reducirá hasta el 26,5%.
Sin embargo, estos cálculos reflejan las disparidades regionales. Mientras Eslovaquia, Luxemburgo y Eslovenia registrarán abultados incrementos en el porcentaje de gasto público dedicado a los mayores, hasta siete países verán reducida esa ratio, entre ellos España, Francia, Portugal o Grecia. Italia registrará un cambio prácticamente plano y Alemania se anotará el tercer crecimiento de menor intensidad.
Teniendo en cuenta únicamente los gastos de pensiones, en 2019 fueron el 12,1% del PIB de los Diecinueve- Para 2040, se elevará al 13,4%, aunque para 2070 se reducirá hasta el 12%.
«Sin medidas correctivas de reforma de las pensiones, el envejecimiento de la población resultará en un ensanchamiento de la brecha de financiación en la mayoría de países. Además, los sistemas sanitarios y de cuidados afectarán de forma adversa a las finanzas públicas en las próximas décadas», ha subrayado el BCE en su ‘paper’.
Si solo se tiene en cuenta el incremento en el gasto público dedicado a los mayores para 2040, cuando se jubilará la mayor parte de la generación ‘baby boom’, España también se encuentra entre los países menos expuestos a ello. Únicamente Chipre, Malta y Finlandia, registrarán un alza menor, mientras que Letonia y Estonia observarán descensos.