Como si fuera un eterno día de la marmota, o un partido del siglo cada dos meses, las cumbres de cambio climático siempre tienen un tufillo de trascendentales. La que se celebra en Katowice (Polonia) durante las próximas dos semanas no podía ser menos. Aunque cada uno tiene su particular visión sobre lo que hacen los representantes que asisten.
En el caso español se ha ido con artillería de primera. No es para menos. La Cumbre del Clima (COP24) que se celebra en tierras polacas hasta el día 14 de diciembre tiene que ratificar y sobre todo acelerar lo acordado en el Acuerdo de París en 2015. Se examinará cómo se está gestionando la evolución en las emisiones contaminantes producidas, y se analizará la previsión para 2030, fecha marcada en rojo por mucho expertos como de «no retorno» si no se alcanzan los objetivos fijados en Francia.
Así pues, ante semejante panorama, España ha querido mandar un mensaje de contundencia contra el cambio climático. Quizá demasiado. A la presencia de la ministra del ramo, Teresa Ribera; se ha sumado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuyo paso ha sido testimonial por Katowice, puesto que ha llegado, ha dado su discurso y en la tarde del mismo lunes abandonó Polonia.
Todo ello le ha pillado en un momento muy convulso al presidente. Por eso cabe cuestionarse si su presencia era necesaria en Katowice justo el día después de unas elecciones autonómicas en España. Fuentes de Ciudadanos aseguran a MERCA2 que «el cambio climático es uno de los mayores retos que afronta el ser humano como especie, y como tal nos lo tomamos en Ciudadanos. Por eso, entendemos que es obligada la presencia del presidente en la cumbre del clima». No obstante, desde la formación naranja matizan que les gustaría que «Sánchez y su Gobierno se dedicaran a tomar medidas efectivas de lucha contra el cambio climático y dejaran de aventar ocurrencias y globos sonda que sólo buscan maquillar la imagen de un Gobierno sin ideas y sin poder parlamentario para llevarlas a cabo».
LA PROPAGANDA DE SÁNCHEZ EN EL COP24
Sobre la excesiva representación española en el COP24, donde no han acudido los primeros ministros ni de Francia, ni de Alemania; así como los habituales ausentes Donald Trump y Vladimir Putin, el partido de Albert Rivera señala a este medio que «el Gobierno de Sánchez sobreactúa siempre. Vive del postureo y de la propaganda. El problema es que Sánchez se está dedicando a hacer propaganda con temas muy importantes y en los que nos jugamos mucho, como el cambio climático».
De hecho, tal y como se muestra en las redes sociales, realmente da sensación de forzar una imagen más que otra cosa. Así ha sido el video gobernamental con mensajes leídos en torno al cambio climático.
La lucha contra el #CambioClimático determina nuestro bienestar presente y futuro. No puede haber más excusas. Es hora de actuar #PorElClima, de avanzar juntos hacia un #PlanetaSano.
Hoy en la #COP24 de Katowice tenemos una nueva oportunidad para cumplir con el #AcuerdoDeParís. pic.twitter.com/iAyaF0wDhJ— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 3 de diciembre de 2018
Pero no es la única crítica que ha llovido sobre la intervención de Pedro Sánchez en el COP24. El eurodiputado de Podemos Xabier Benito considera que el discurso del presidente «deja muchas lagunas y alguna decepción».
Benito, miembro de la Comisión de Energía e Industria del Parlamento Europeo (PE), lamenta en un comunicado que el discurso de Sánchez mencione la necesidad de cumplir los compromisos internacionales, pero «no de aumentarlos», algo esencial para cumplir el compromiso internacional de limitar el aumento de las temperaturas a 1,5 grados centígrados con respecto a niveles preindustriales.
«España no se libra de tener que ser más concreto y ambicioso en la cuestión climática, al igual que otros Estados aquí presentes. Ubicados en el sur de Europa, somos uno de los países más vulnerables al cambio climático», estima.
AHORA O NUNCA
Al margen de postureos o propaganda, la realidad es que se trata de una cumbre muy importante. Así, el diputado de Equo en Unidos Podemos, Juantxo López de Uralde, estima que «la principal demanda de cara a la COP24 se concreta en la necesidad de aumentar el compromiso de los países para alinearse con el objetivo de 1,5 ºC que sin duda marcará el resultado de esta Cumbre».
Añade, y eso es lo esencial que «cualquier acuerdo que no se fije ese objetivo será insuficiente. Para ello es imprescindible que se fijen nuevos objetivos de reducción de emisiones acordes con ese objetivo», recalca en un artículo publicado en Contrainformacion.es.
Uralde asume que «la novedad más relevante [del COP24] es que estamos ya en la cuenta atrás: si para 2030 no hemos sido capaces descarbonizar en gran medida nuestra economía estaremos ante un enorme fracaso. El reto es inmenso, pero no podemos dejarlo ir porque es mucho lo que nos jugamos».
Y TODO ELLO ANTE EL HURACÁN VOX
Por si fuera poca la responsabilidad que entraña el desafío contra el cambio climático, el presidente del Gobierno se ha tenido que comer el viaje a Polonia en mitad de una crisis de Gobierno por los resultados cosechados por el PSOE-A en Andalucía tras un importante retroceso con respecto a las últimas elecciones. Y todo ello con la entrada en el parlamento andaluz del partido de extremaderecha Voz.
Aunque según fuentes de Ciudadanos, estima que «se puede estar en la Cumbre del Clima y dar la cara ante el revés que los andaluces le han dado a su política de cesiones a los separatistas y populistas. En lugar de ello, Sánchez sigue escondido. El cumplir con su agenda presidencial no excluye dar explicaciones a los ciudadanos en momentos como este, cuando una vez más es evidente que España necesita ir a las urnas».