El aceite de girasol es uno de los aceites más utilizados en España para cocinar. Pese a que el de oliva es una de las señas de identidad de nuestro país, lo cierto es que el uso del de girasol a la hora de freír está muy extendido, especialmente por su ligereza, que permite conservar mejor el sabor de los alimentos que se cocinan con él, y por su precio significativamente más barato. Sin embargo, cada vez es más difícil encontrarlo en el supermercado debido a la escasez de existencias provocada por la guerra de Ucrania. Por eso, aquí te contamos cuáles son las mejores alternativas para sustituir al aceite de girasol en tu cocina.
1¿Realmente es bueno cocinar con aceite de girasol?
El aceite es, en general, un producto básico en la cocina española. No hay prácticamente ninguna receta que concibamos sin él. Además, es uno de los productos más sanos que podemos consumir. Concretamente, el aceite de girasol es el segundo más sano de los que podemos encontrar, por detrás del de oliva, gracias a la gran cantidad de vitaminas que contiene. Eso sí, como todos aceites, es extremadamente calórico por lo que debemos controlar la cantidad de fritos que incluimos en nuestra dieta. Lo cierto es que este tipo de aceite presenta algunas ventajas como su bajo precio o su sabor menos intenso. Sin embargo, hay otras alternativas para freír igual de saludables y recomendables.