Estados Unidos se vuelca en conseguir que la Unión Europea deje de depender lo antes posible de Rusia en materia energética. Ya ha firmado un acuerdo para incrementar un 68% el envío de gas natural licuado (GNL) a Europa durante los próximos años y sigue enfrascado en garantizar acuerdos con otros países suministradores. Entretanto, Naturgy vigila los próximos movimientos de la diplomacia americana, ya que si se consigue reabrir el gasoducto Magreb, sería una de las beneficiadas.
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, se encuentra inmerso en una crucial ronda de contactos por Israel, Marruecos y Argelia, para tratar varios temas clave para el futuro, como la estabilidad en la zona, los derechos humanos, el fortalecimiento de las relaciones internacionales y la energía.
Uno de los objetivos del viaje de Blinken es conseguir que Argel acepte reabrir el gasoducto del Magreb y aumente su producción de gas. La intención de la diplomacia norteamericana es calmar las aguas en el norte de África y estabilizar una zona vital para sus intereses geoestratégicos y también para los intereses geoenergéticos de la Unión Europea.
Si la diplomacia americana convence a Argelia de la importancia de reabrir el gasoducto el Magreb, Naturgy podría volver a gestionarlo
El plan de Joe Biden se activó con la carta de Pedro Sánchez al rey de Marruecos, Mohamed VI, y el viraje de 180 grados de la política exterior española con respecto al Sáhara Occidental. El siguiente paso lo dio Marruecos con la vuelta de su embajadora a Madrid. Ahora toca dar otro paso decisivo: convencer a Argelia de que sus intereses están más próximos a occidente que a Rusia. Abandonar viejas rencillas enquistadas durante décadas y abrirse al nuevo panorama mundial pueden convertir a Argelia en un actor principal y con elevadas ganancias.
Argelia se encuentra ante un momento histórico. Las decisiones que deben tomar los altos mandatarios argelinos pueden afectar a sus países en las próximas décadas. El reparto del poder en el mundo está cambiando a una velocidad inusitada. La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha puesto al mundo entero en alerta y todos quieren apostar a caballo ganador.
El propósito de EEUU de convertir a España en el hub energético europeo y, de esa manera, desligar a la UE del gas ruso a la mayor brevedad posible pasa por ampliar considerablemente las interconexiones gasísticas tanto con el norte de África (reapertura del gasoducto del Magreb), como con Francia (construcción del gasoducto Midcat y algún tubo más si fuera necesario).
MÁXIMA EXPECTACIÓN
Naturgy está muy pendiente de las reuniones de la diplomacia americana al más alto nivel que tendrán lugar esta semana, ya que sus relaciones con Argelia son fundamentales para su negocio gasista. Sonatrach, la empresa estatal argelina de gas y petróleo, es una de sus accionistas y la que decide el precio al que se vende el gas.
Si Blinken consigue convencer al presidente argelino, Abdelmayid Tebune y a su ministro de Exteriores, Ramtane Lamamra, de la importancia de reabrir el gasoducto del Magreb, Naturgy podría renovar la concesión expirada el 31 de octubre de 2021 para explotar esta conexión, como había hecho los 25 años anteriores.
EL IMPACTO EN BOLSA PARA NATURGY
El momento que atraviesa el sector energético es de gran trascendencia y eso puede afectar en uno u otro sentido a la valoración de Naturgy en Bolsa. Para el analista de iBroker.es Antonio Castelo, «como ya se vio durante el último trimestre del año es evidente que una subida en los precios del gas beneficia a Naturgy y así lo ha reflejado su cotización en estas últimas semanas».
Sin embargo, «dado su modelo de negocio, esa subida en los precios del gas que le beneficia, se va a compensar con un impacto negativo por menores ingresos regulados (obviamente en España) y, por la menor capacidad en el gaseoducto del Magreb (hasta que Argelia decida reabrirlo, si es que se llega a ese acuerdo), junto con menores márgenes de comercialización», resalta Castelo. «Y eso la cotización ahora no lo está contemplando», concluye.
Además, el analista de iBroker.es considera que ahora mismo hay que estar pendiente de otros asuntos con este valor, «es importante ver cómo se van a resolver las diferencias entre sus accionistas de control y, en tanto en cuanto no se produzca la escisión definitiva de los negocios del Grupo, anunciada recientemente, y se vea qué parte toca a quién, no vale opinar mucho sobre Naturgy, ya que el resultado de esa división, hoy por hoy, es muy difícil de determinar».
Desde hace meses, el consenso de los analistas coincide en señalar que Naturgy ha estado cotizando por encima de su valor real. Por ejemplo, a 31 de diciembre pasado el precio promedio objetivo se situaba en 21,93 euros por acción y cerraba a 28,63 euros.
Como consecuencia del anunciado spin-off la cotización se desplomó hace unas semanas. «Esto es lógico, ya que si bien es verdad que cuando se produce un spin-off es muy normal que la suma de las partes llegue a valer más de forma individual que el negocio en su conjunto, en este caso habrá que esperar para ver cómo se va a definir realmente, cómo se dividirá exactamente el negocio, los ingresos y los costes y, en definitiva, como será la estructura que quede», afirma Castelo.