ISDIN, la empresa dermocosmética española, ha sorteado la crisis provocada por la pandemia con excelentes resultados y se ha convertido en la compañía líder a nivel global en fotoprotección y cuidado de la piel.
Las cifras que presenta el CEO de la compañía, Juan Naya, revelan el crecimiento de la compañía, sobre todo en los mercados internacionales, con especial relevancia en China y Estados Unidos donde esperan aumentar la cuota de negocio.
En 2020, ISDIN facturó 302 millones de euros, aumentando la cifra a 340 millones en 2021 (dos años marcados intensamente por la pandemia del Covid). Y en 2022, según desveló Juan Naya, el objetivo es alcanzar los 400 millones de facturación lo que significaría un crecimiento del 13% con respecto al ejercicio anterior.
Naya, consejero delegado de ISDIN desde 2015, es uno de los artífices del gran crecimiento internacional y confirmó que “ya en 2019 el negocio internacional pesaba más que el negocio en España”. El CEO de ISDIN predice que en 2022 la compañía aspira “a llegar a los 400 millones de euros y a una cuota de mercado internacional del 60%”, algo que mantendrá a ISDIN como líder en fotoprotección y cuidado de la piel a nivel numdial.
La compañía, nacida en Barcelona en 1975 a raíz de una ‘joint venture’ de las empresas Puig y Esteve, cuenta actualmente con más de 1.300 trabajadores, 14 filiales y está presente en más de 50 países. Por ejemplo, en el mercado chino, muy sensible al tema de la fotoprotección, ISDIN es líder. “Se vende más ‘Fusion Water’ en China que en el resto del mundo”, aseguró.
Juan Naya, para quien “los problemas son retos y detrás de los retos siempre hay una oportunidad”, explicó cómo el hecho de haber tenido que reinventarse durante la pandemia les ha hecho “salir más fuertes de la crisis sanitaria”. “En un mundo cambiante y tan incierto como el que nos toca vivir, es importante tener la cultura y los equipos preparados para evolucionar y adatarse a cualquier situación con rapidez”.
SOSTENIBILIDAD
Juan Naya afirma que uno de los pilares del modelo de éxito de ISDIN es la sostenibilidad. Sostenibilidad entendida no solo como respeto y cuidado del medio ambiente, sino también de las personas y la sociedad. “En ISDIN estamos cada vez más comprometidos con la sostenibilidad y por ello es crucial nuestra contribución en la salud de la piel de las personas, independientemente de dónde vivan y de su condición social”.
En esta línea la compañía recibió en 2021 la certificación B Corp, que la reconoce como una empresa comprometida con el entorno a todos los niveles. Este reconocimiento es motivo de orgullo para la empresa y la sitúa «como una compañía que, en lugar de ser parte del problema, es parte de la solución”, poniendo en valor la labor didáctica de ISDIN, que no solo se centra en soluciones para la salud de la piel, sino que también invierte importantes esfuerzos en “concienciar, educar e impulsar el conocimiento, la investigación y la ciencia”.
De hecho, en 2021 vio la luz la Cátedra UB-ISDIN Live Young, en colaboración con la Universidad de Barcelona y que pone bajo estudio el exposoma, es decir todos aquellos elementos externos que influyen en la salud de la piel. Juan Naya también recuerda la colaboración que ISDIN lleva a cabo con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) apoyando el Proyecto COLPLAI, que contribuye a la investigación sobre la cuantificación y caracterización de la materia orgánica liberada por los plásticos y sus efectos sobre los microbios marinos.
Además, ISDIN ha sido reconocida por la organización internacional CDP como una de las empresas líderes en la acción climática en su cadena de suministros. El ranking, elaborado en colaboración con Boston Consulting Group, sólo incluye a 16 empresas españolas entre las que junto a ISDIN están Telefónica, Acciona, Iberdrola o NH.
Naya describe ISDIN como una compañía que busca el cambio. “Nuestra contribución no hace más que dar sentido a ISDIN en el mundo que vemos a futuro”, asegura este astrofísico nacido en Villanueva de Sigena (Huesca) que ahora lidera el laboratorio español. “Cada compañía tendrá que buscar su rol. Y aquellas que no lo encuentren tendrán un reto: determinar para qué existen”, sentencia Naya, para quien la fuerza de ISDIN conseguirá “que todos podamos vivir en un mundo más sostenible”.