Los ecos de un 2021 convulso en materia energética todavía resuenan en las estrategias de las grandes eléctricas. Así, tras la presentación del balance financiero del último ejercicio, Naturgy ha mostrado que se apuesta ganadora es el gas natural, y en concreto la venta minorista. Una situación que contrasta con el negocio de generación de electricidad -y también comercialización-, donde ha tenido un comportamiento bastante errático en pleno auge renovable.
Y es que la compañía dirigida por Francisco Reynés siempre había tenido como talón de Aquiles la puesta en marcha del negocio renovable, algo que todavía se evidencia en contraste con la recuperación de su negocio de venta de gas tras la pandemia. Con los datos públicos del año pasado, Naturgy constata que el negocio de la generación no es su preocupación en estos momentos.
En materia nuclear, donde la producción es constante en el tiempo, la gasista ha pasado de generar a 4.387 GWh a 4.274 GWh. También ha tenido un retroceso en la producción de energía solar, que ha pasado de 320 GWh a 268 GWh. Y lo más curioso para Naturgy es que, incluso, en el segmento de los ciclos combinado también ha tenido una reducción en la producción: de 12.856 GWh a 12.675 GWh. La única tecnología que ha sumado en positivo con respecto a 2020 ha sido la eólica.
Esta situación refleja la capacidad instalada de la energética, que en algunos ámbitos, como la solar fotovoltaica, apenas ha añadido 1 MW con respecto al ejercicio anterior. Y por lo que respecta a la eólica, apenas entraron 70 MW de capacidad de un año frente a otro. Todo esto confluye en un año raro, donde lógicamente hizo falta vender menos energía para ganar más dinero debido al alto coste del mercado mayorista. Por lo tanto, habrá que esperar a la evolución de este año para saber cómo es el comportamiento del negocio de generación en España para Naturgy.
NATURGY ELEVA EL PESO DEL GAS
En la cuenta de resultados, como marmita que recibe todos los ‘inputs’ del negocio, lo que ha tenido un gran rendimiento ha sido en la venta de gas minorista, sobre todo en el ámbito industrial. En concreto, Naturgy ha crecido un 4,1% en la venta de gas natural a clientes residencial, y eleva la cifra por encima de los 20.500 GWh. Aunque el gran subidón ha llegado con los clientes industriales, donde el crecimiento se eleva hasta el 14,6%; unos datos que vienen marcados por la clara recuperación frente a los años de la pandemia.
Por lo que respecta a la venta de electricidad, la compañía de Francisco Reynés, sin embargo, ha dado un pequeño traspiés en la venta residencial, con una caída del 7,8% con respecto al ejercicio anterior. Igual que en el segmento pymes, donde Naturgy ha vendido un 5% menos de electricidad con respecto a 2020. Un síntoma de que demuestra la pérdida de clientes que están sufriendo las grandes compañías a manos de las comercializadoras independientes y se refleja en este saldo neto de venta de electricidad.
LAS CONSECUENCIAS DE TODO
Bajo este escenario, la semana pasada se conocía que Naturgy ha realizado unas provisiones por 234 millones de euros en sus cuentas de 2021 debido al desestimiento de contratos de venta de gas con clientes. En un conferencia con analistas para presentar los resultados del año pasado, el responsable de Planificación y Control Financiero del grupo, Jon Ganuza, indicó que ha habido varios contratos cancelados, debido a «las perspectivas actuales del escenario energético y considerando las incertidumbres», que han conducido a la citada provisión.
En este sentido, añadió que aunque se trata principalmente de contratos de suministro, en especial con clientes industriales, también incluyen contratos actualmente vendidos por mercados y aprovisionamiento. En concreto, la ruptura de los contratos se inició el pasado mes de diciembre y «también está actualmente en marcha en enero y se puede hacer en febrero», añadió.
Por otra parte, la firma señaló ciertos retrasos en el pasado ejercicio en sus inversiones en renovables debido a la inflación por los altos costes de las materias primas y al suministro de estos productos.
De todas maneras, destacó que el grupo desarrolla esta capacidad en renovables en países donde cuentan con objetivos a cumplir, por lo que si los precios siguen altos y el mercado no da una señal de precio lo suficientemente buena para que esos proyectos sean rentables, habrá que contar con un mecanismo de apoyo que les permita ser rentables «o de lo contrario no serán capaces de cumplir el objetivo renovable». Además, consideró que hay que mirar a largo plazo, a pesar de estos retrasos por el actual contexto económico mundial, y que se alcanzarán los objetivos de desarrollo de la compañía de unos 10 gigavatios (GW) entre 2021-2025.