En el tratamiento de los llamados juanetes y dedos de garra, uno de los avances médicos más significativos es la cirugía percutánea mínimamente invasiva. Este tipo de intervención quirúrgica se ha convertido en la alternativa más solicitada por los pacientes de centros especializados en el tratamiento de patologías del pie.
En Alicante, la Clínica San Román se ha proyectado a nivel nacional e internacional como un centro especializado en este tipo de procedimientos de cirugía del pie. Los doctores Israel y José Manuel San Román son dos de sus podólogos expertos que han desarrollado técnicas efectivas dentro de este tipo de cirugías.
Los juanetes y dedos de garra son patologías muy comunes
El nombre real de los juanetes es hallux valgus, es una deformidad progresiva y compleja que afecta a la parte delantera del pie. Los signos más evidentes son la desviación del dedo gordo y la protuberancia ósea a nivel de la articulación del primer dedo del pie. La consecuencia, inflamación de la articulación, dolor y puede ser la causa de otras deformidades asociadas a los dedos, como los dedos en garra, martillo o cuello de cisne. Según los expertos de la Clínica San Román, hasta el 35% de la población española sufre de juanetes.
Sobre los dedos de garra, los doctores San Román explican que es una afección que aumenta con la edad, siendo hasta 5 veces más habitual en las mujeres. Se origina principalmente por desequilibrios en las estructuras musculares y óseas del pie. Esto va flexionando las articulaciones de las partes proximal y distal, lo que va deformando la anatomía natural de los dedos.
Hasta la aparición de la cirugía percutánea mínimamente invasiva, los procedimientos solían ser dolorosos. Implicaban una larga intervención que muchas veces debía hacerse por partes, dependiendo de la gravedad del caso. También requerían una convalecencia posoperatoria que impedía al paciente seguir desarrollando su rutina.
Ventajas de la cirugía percutánea
Los doctores Israel y José Manuel San Román explican que la primera ventaja de este tipo de cirugías es que son ambulatorias, lo que permite al paciente salir andando por su propio pie sin ningún tipo de ayuda. Son incisiones de unos pocos milímetros que se hacen específicamente en los puntos neurálgicos del problema, sin dolor ni hinchazón de la zona intervenida.
Otra de las ventajas de la cirugía percutánea es una recuperación más rápida y sin apenas dolores posoperatorios, porque respeta las articulaciones y tejidos blandos. Con las precauciones recomendadas, el individuo puede continuar con su rutina diaria sin mayores complicaciones. No requiere la fijación con cuerpos extraños como tornillos y agujas que otras técnicas requieren.
Los especialistas recomiendan que las intervenciones para corregir estas anomalías se hagan cuando estos problemas comienzan a molestar. La utilización de paliativos como calzados o plantillas medicadas solo retrasarán el problema y no representan una cura definitiva. Por ello, se deben tratar de la forma adecuada mediante una previa evaluación de un médico especializado como los de Clínica San Román.