El español Alejandro Mateo es un joven diseñador que ve los sombreros como una parte fundamental de la personalidad de sus usuarios. Los concibe funcionales, pero al mismo tiempo como un atuendo con el que se quiere expresar un mensaje. Los sombreros siempre han pretendido ser la expresión de la personalidad de quien los porta.
El taller de Alejandro Mateo está enclavado entre la aridez del desierto y el mar Mediterráneo, en un rincón de Almería. Según este artesano, el entorno le ofrece la tranquilidad y los matices necesarios para hacer que su inspiración se manifieste.
Elaborar sombreros: la inspiración de Alejandro Mateo
En su ‘Palacio de Cactus’, este diseñador recibe a todo aquel que quiera conocer de primera mano su trabajo. Alejandro Mateo elabora sus sombreros con materiales naturales que se obtienen de manera sostenible. Por ello, sus diseños y la paleta de colores que utiliza son influencias de la naturaleza y de culturas étnicas que ha conocido en sus viajes alrededor del mundo. España, Escocia, Francia, Bahamas y México, Singapur, Sudamérica, Medio Oriente y África han sido algunos de sus destinos. Estos lugares le sembraron la idea de transformarse en diseñador de sombreros. Dejó de lado su ascendente carrera de chef para convertir lo que hasta su momento había sido un hobby en su nueva forma de vivir. Admite que no tenía nada planificado, pero cree que cuando las reglas no están escritas se es dueño del destino.
Sombreros y calzados totalmente personalizados y únicos
A través de su web, Alejandro Mateo ha logrado posicionar sus sombreros y sus calzados, elaborados artesanalmente. Cada uno de sus diseños se pueden complementar con adiciones personalizadas, según el gusto de cada quien. Cuando el cliente posee una idea de lo que quiere, tiene la opción de comunicarse directamente con el diseñador para discutir las sugerencias.
Los compradores pueden elegir el material, el diseño, estilo y color que tiene en mente. Los elementos base siempre serán la paja natural y el fieltro de piel de la más alta calidad que hay en el mercado. A estos se les añaden los accesorios de diseño, en función del gusto de quien lo vaya a usar. La misma operación se puede hacer para adquirir sus distintos diseños de calzados.
Tanto los sombreros como los calzados se fabrican en un lapso de 2 a 3 días, a partir de la concreción de la solicitud del cliente. Los pedidos se entregan de manera gratuita, en 4 días hábiles para destinos nacionales. Para otros países, puede tardar hasta 21 días. Aunque algunos puedan preferir la inmediatez, para la mayoría de los clientes la espera vale la pena si se trata de un diseño personalizado. Según Alejandro Mateo, esta es una característica imposible de conseguir en una tienda convencional.