jueves, 12 diciembre 2024

Calma tensa en Airbus España ante la decisión del Ministerio de Defensa

Se llama C-101 y es el avión entrenador que utilizan los alumnos de la Academia General del Aire. Pero está ‘viejito’. Construido por la antigua Construcciones Aeronáuticas (CASA), su primer vuelo fue en 1977 y, como mucho, le queda vida hasta 2021-2022. Su relevo todavía no se ha decidido, y en Airbus España ya han presentado un proyecto al Ministerio de Defensa que, de momento, no se ha pronunciado.

“Hemos ofertado un sistema integral de formación en el que el avión es solo una parte”, indicó Fernando Alonso, presidente de Airbus España, en un acto organizado por Nueva Economía Forum. ¿Y cómo será ese avión? Un híbrido entre el C-101 y el F-5 que tendrá un morro más grande para meter el radar y al que le valdrían los útiles del F-5.

Dos son los motivos que han llevado a los ingenieros de Airbus España a sintetizar en uno ambos aviones. El primero, que el F-5 también ha soplado unas cuantas velas (data de los años 80). Y, segundo, matarían dos pájaros de un tiro. ¿Por qué? Porque ambos aviones forman parte de la instrucción de los cadetes.

Sin voluntad del Gobierno no se puede desarrollar un avión de estas características. Luego podría venderse a terceros países

Así, el bautizo del aire lo suelen hacer en una avioneta. Después, pasan a la línea de caza, con el C-101. Más tarde, continúan con un turbo reactor (el F-5), para finalmente dar el salto al Eurofighter. “Se cubrirían dos campos con un único avión”, apunta Francisco Gil, de Comisiones Obreras de Airbus España.

“Estamos a la espera de que el Ministerio de Defensa nos diga qué tipo de avión quiere, con qué prestaciones y las actuaciones que necesitan. Con ello podremos definir el avión evaluar lo que costará y cuáles serán los plazos de desarrollo, añadió Fernando Alonso. Por tanto, la idea es que sea un avión completamente nuevo. “Lo ideal sería que se acabará construyendo en España”, añade Francisco Gil.

LA COMPETENCIA EN AIRBUS

Fernando Alonso, en el acto antes citado, también reconoció que el C101 tenía dificultades con la corrosión. Aunque no son las únicas, y no son de ahora. “Hace 20 años ya teníamos problemas con las piezas del avión, como las trampas del tren de aterrizaje. Hoy es un gran inconveniente porque, por no tener, no tenemos ni útiles”, señala un trabajador de Airbus.

“Es una inversión muy potente en la que tiene que haber voluntad de compra”, indica Francisco Gil. Y añade: “Sin voluntad del Gobierno no puedes desarrollarlo”. Si acabara habiendo una respuesta positiva, sería posible colocarlo a terceros países.

¿Qué otras piedras en el camino hay? En Airbus España lo que desean es que el proyecto acabe aprobándose y se acabe construyendo íntegramente en España, como se hizo con anterioridad con el C-101. Pero CASA ya no existe y Airbus es un consorcio en el que intervienen también Francia y Alemania cuyo porcentaje en el accionariado es del 10%, cada uno, frente al 4% de España.

Fuentes consultadas por Merca2 indican que en Airbus Alemania se está diseñando otro avión para suceder al C-101. Esto significa que, por una parte, hay competencia y, por otra, que sea cual sea el modelo finalmente elegido, podría no desarrollarse íntegramente en España. Entonces entraría en juego la política. ¿Acabaría eligiendo el Ministerio de Defensa un modelo diseñado fuera de España? ¿Dónde se fabricaría? ¿Presionará Alemania? ¿Cómo afectaría al empleo?


- Publicidad -