La inversión bursátil de BBVA en Telefónica acumula más de 1.400 millones de euros de pérdidas, por encima incluso de los 1.300 que suma en la entidad turca Garanti en 2018.
Todos los focos están puestos en Turquía, con una moneda por los suelos que castiga día tras día el 49,85 % de capital que tiene BBVA en la local Garanti. Sin embargo, mucho más cerca, los accionistas de la entidad presidida por Francisco González ven cómo ser la posición dominante en Telefónica (5,17 %) resulta una losa en su inversión.
En enero de 2018, BBVA anunció un cargo a los resultados de 1.123 millones de euros “como consecuencia de la evolución de la cotización de Telefónica” y en aplicación de la normativa contable NIC 39. La entidad afirmó en el hecho relevante enviado a la CNMV que «lo anterior no afectaría ni al patrimonio neto ni al CET1 del Grupo BBVA, dado que las minusvalías latentes ya se deducen de los mismos». Tampoco supondría, añadió la el banco, «una salida de caja ni una modificación en la cuantía de pago de dividendos que está previsto proponer al Consejo de Administración».
La acción de la compañía dirigida por José María Álvarez Pallete comenzó el año a un precio de 8,12 euros en el principal selectivo español. Ocho meses después, los títulos cerraron a 6,98 euros (31 de agosto), lo que significa un retroceso del 14,03 %. La cotización de los títulos dibuja un canal bajista que comenzó en junio de 2015. Salvo una pequeña remontada entre enero y marzo de 2017, la línea no ha cesado de caer sin encontrar por ahora un soporte.
Trasladado este porcentaje a euros, las 268.230.302 acciones que posee la entidad valen 305,78 millones de euros menos. Sumados a los 1.123 millones hechos públicos en enero, la pérdida acumulada de BBVA en Telefónica asciende a 1.428,78 millones de euros.
SIGUE LA SANGRÍA DE BBVA EN GARANTI
La posición de BBVA en Garanti sigue dando quebraderos de cabeza a sus dirigentes. La acción del banco otomano ha caído un 44,49 % en 2008 (del 1 de enero al 31 de agosto). Con la lira turca por los suelos (actualmente se cambia a 0,13 euros), el 49,85 % que posee la entidad española en la turca se ha depreciado este año 1.298,3 millones de euros.
«La lira turca comenzaba agosto con cierta presión al perder mínimos anuales en la zona de 5 liras por dólar», explica Eduardo Bolinches, analista colaborador de ActivTrades. La depreciación fue muy acusada puesto que cayó a niveles inferiores a 7 antes de que el gobierno turco intentase contener la epidemia», añade. Para Bolinches, «el problema radica en el miedo fundado a que haya una expansión descontrolada de devaluaciones en el resto de países emergentes, sobre todo en algunas de las economías englobadas bajo el término BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica)»
A pesar de ello, el negocio de BBVA en el país euroasiático reportó en el segundo trimestre del año un beneficio de 373 millones de euros, tal y como informó en la presentación de resultados celebrada en julio. El peso de Turquía en los resultados de BBVA se sitúa en el 11,5 %, una ponderación relevante aunque lejos del 37,7 % de México o el 23 % de España.
El banco presentó un beneficio atribuido de 2.649 millones de euros en el primer semestre. El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres Vila, explicó durante la presentación de los mismos que “arrancamos 2018 con mucha fuerza el trimestre pasado, y en este segundo trimestre hemos tenido unos excelentes resultados a pesar de las incertidumbres existentes en algunos de los mercados en los que estamos”. Sin embargo, estas cifras no parecen convencer a los inversores y los títulos de la entidad siguen perdiendo valor.
La acción de BBVA ha caído en el parqué madrileño un 24,47 % los primeros ocho meses del año. En concreto, los títulos de la entidad iniciaron la cotización anual a un precio de 7,11 euros. El pasado 31 de agosto cerraron a 5,37 euros. De esta manera, se aúpa como el banco español cotizado que más ha bajado en este periodo. Le ha seguido de cerca Santander (-21,75 %), Banco Sabadell (-20 %) y Bankia (-18,84 %). Los “mejor” parados dentro de la masacre sectorial han sido Bankinter (-3,03 %) y CaixaBank (-0,51 %).