El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anticipado este miércoles ante el Pleno del Congreso que España contará, gracias al impulso de las energías renovables, con «uno de los precios más competitivos» de la electricidad en Europa a partir de 2023, «con mejores perspectivas aún en 2025», para lograr unos costes de la energía «sensiblemente inferiores» a los países de su entorno.
Así lo ha manifestado durante su intervención en la Cámara Baja, a la que ha acudido para rendir cuenta de las últimas cumbres europeas antes de la sesión de control al Gobierno en el Congreso de este miércoles.
En su intervención, Sánchez ha recordado que la escalada de los precios de la electricidad formó parte de las discusiones en estos encuentros, a iniciativa de España, que ha defendido la reforma del mercado eléctrico y del sistema de fijación de precios del mercado marginalista.
«EL MERCADO NO SE BASTA PARA OFRECER SOLUCIONES»
Así, ha abogado por una reforma del sistema de fijación de precios «lo más ambiciosa posible» para desvincular el precio de la energía más cara, el gas en estos momentos, con el precio real del mercado mayorista, pero también la fijación de un precio máximo de gas, un sistema de compras conjuntas, una apuesta por los contratos a largo plazo y mecanismos contra la especulación en los mercados de derechos de emisión de CO2.
Y es que el presidente ha asegurado que «el diseño del mercado interior no está siendo capaz de dar respuesta eficaz» a este reto, subrayando que «el mercado no se basta a sí mismo para ofrecer las soluciones necesarias».
«LAS ENERGÍAS LIMPIAS NO SON EL PROBLEMA, SINO LA SOLUCIÓN»
Aunque considera «razonables» las perspectivas para contar con energía a medio plazo «a precios bajos», Sánchez ha defendido adoptar medidas en el conjunto europeo para que una nueva crisis en estos mercados no vuelva a impactar de esta forma en la factura.
Además de defender las medidas acometidas por el Gobierno, Sánchez ha subrayado que estas «perturbaciones» no tienen relación con el desarrollo y el mayor peso de las energías limpias que, ha enfatizado, «no son el problema, sino la solución a esta crisis de energía.