Estados Unidos y Europa empiezan a implementar leyes estatales y locales en torno a la figura del coche autónomo con el objetivo de atraer la inversión de las empresas que trabajan en su desarrollo.
Es probable que el Congreso de Estados Unidos establezca estándares nacionales de seguridad para los vehículos autónomos (VA), aunque se espera que las reglas relacionadas con las pruebas, la congestión y la administración de la flota se regulen en el ámbito estatal o local, según un análisis de Bloomberg.
La ausencia de prohibiciones federales allana el camino para que los 50 estados de EE. UU. regulen la tecnología de los coches sin conductor. Por este motivo, muchos de ellos han aprovechado la oportunidad para solicitar inversiones de empresas automovilísticas y de tecnología automotriz como Apple, Waymo, Tesla y General Motors.
Más de 30 estados han aprobado leyes o emitido órdenes que regulan las licencias, los seguros, las pruebas y/o el desarrollo de vehículos autónomos. California, Arizona y Florida han estado a la vanguardia en este sentido. Es poco probable que cualquier regulación federal plantee desafíos significativos para la implementación, indican los analistas.
“Es poco probable que la regulación federal, todavía en fase germinal, tenga mucho efecto en la industria automotriz de Estados Unidos durante los próximos años”, considera Nathan R Dean, Senior Government Policy Analyst de Bloomberg Intelligence. Se espera que las nuevas reglas, que deben ser escritas e implementadas por el Departamento de Transporte y la Administración Nacional de Seguridad en el Tráfico en Carreteras, reflejen en gran medida las reglas ya existentes y se enfoquen en cuanto a la producción y la seguridad. El analista no considera que aumenten drásticamente los costes por la regulación.
La nueva legislación afecta sobre todo a fabricantes de automóviles, empresas tecnológicas y otras firmas que han mostrado su interés en los coches autónomos. Entre ellas están: Ford, General Motors, Toyota, Tesla, Harley-Davidson, Intel, BMW, Continental, Hertz, 3M, Honda, Hyundai, Kia Motors, Nissan y Enterprise Holdings.
EUROPA: OTRA VISIÓN DEL COCHE AUTÓNOMO
Al otro lado del Atlántico, decenas de ciudades en toda Europa están maniobrando para atraer empleos de investigación e inversión a medida que la primera ola de políticas sobre vehículos autónomos se afianza. Mientras en Estados Unidos piensan en pruebas y desarrollo tecnológico, los responsables políticos focalizan su atención en la forma en que la adopción generalizada del VA afectará a la fuerza de trabajo, la congestión del tráfico, la contaminación y la seguridad vial.
Eso podría llevar a políticas proteccionistas para suavizar los impactos en los trabajadores más vulnerables, como los conductores profesionales, los mecánicos y los trabajadores de la industria de seguros. Sin embargo, los analistas de Bloomberg no esperan que tales iniciativas de reeducación y reciclaje impidan la adopción autónoma de vehículos.
Los reguladores europeos intentarán equilibrar los beneficios del lanzamiento de coche autónomo conectado con los posibles impactos sociales negativos que conlleva avanzar demasiado rápido. Eso requerirá, según los analistas, políticas matizadas que por un lado incentiven la inversión y por otro protejan contra interrupciones económicas a gran escala.
La UE actualizó su marco de aprobación de vehículos en 2018, que debería garantizar que las nuevas tecnologías estén armonizadas entre los países miembros. La mayoría de la regulación adicional de vehículos autónomos se llevará a cabo en los ámbitos estatal y local.
