Porque elegir la capital de Francia para una visita o unas vacaciones, siempre será un acierto. Ya sea una propuesta, una sorpresa o una elección más entre las muchas que a buen seguro tendrán, con ella acertarán siempre. Y es que París es sin lugar a dudas una ciudad que parece creada y edificada para el disfrute del viajero. Las calles, sus plazas, edificios, sus famosos jardines y monumentos parecen creados para que cualquier persona que visite París vea recompensado su viaje y siempre desee volver. Quién no conoce y ha visto en fotos, películas, libros, la Torre Eiffel, el Arco del Triunfo o la famosa Catedral de Notre Dame. Quién no ha soñado con presenciar un espectáculo en el mítico cabaret Moulin Rouge, o perderse en sus barrios más pintorescos, como Montmartre o Montparnasse.
París es una ciudad con la que a buen seguro cualquiera de ustedes habrá soñado en alguna ocasión y también, por qué no decirlo, fantaseado. Cuántos cursos rápidos para aprender francés lo suficiente para desenvolverse en ese viaje que aún no han llegado a realizar, habrán hecho ya. Y digo aún, porque ahora es el momento.
Disponen de una agenda para el verano que hará las delicias de cualquier visitante, tenga la edad que tenga, y un sinfín de actividades a realizar porque París se actualiza continuamente y ofrece lo mejor en cada momento.
Pero la capital del Sena es también la capital del glamur, y sino fíjense en sus tiendas, comercios y las posibilidades de compras que toda ella le ofrece. Todas las grandes marcas y tiendas de lujo se encuentran en la capital de Francia. Parece que quién no está, no existe, al menos en el exclusivo mundo del lujo y la exclusividad. Pero no hay que tener una abultada cartera para poder disfrutar de unas jornadas de compras en la ciudad del Sena. Sus mercadillos son famosos en todo el mundo y en los no menos famosos mercados al aire libre encontrarán todo tipo de artículos con precios de rastro.
Y para los que crean que París es clásica en el turismo, le proponemos visitarla en bicicleta. Nosotros les podríamos dar hasta tres razones para hacerlo, pero no serían más que tres a sumar a las muchas que se les ocurrirán a ustedes. Porque el encanto y el glamur de esta capital no tiene límites.
Visiten París en bicicleta y descubran una ciudad diferente con los encantos y atractivos que ya conocen y soñaron.