Dos millones de pequeñas y medianas empresas españolas, el 56% de las pymes, necesitaron financiación en los seis primeros meses de 2021, según un informe elaborado por la Confederación Española de Sociedades de Garantía (SGR-Cesgar).
Esta cifra supera con creces el dato anual de 2019, en el que el 34,8% de las empresas necesitaron financiación. El estudio, además, corrobora que el impacto de la crisis de la Covid-19 en las pequeñas y medianas empresas sigue siendo importante, ya que solo tres de cada diez pymes afirman haber iniciado la recuperación económica, un 30% dice estar en una posición estable y un 37,4% de ellas asegura que su situación ha empeorado con respecto a 2020.
En la misma línea unas 200.000 pymes (5,5%) son consideradas empresas vulnerables, ya que aúnan el decrecimiento económico con el empeoramiento de su situación financiera. Asimismo, un 4,6% presentan estancamiento económico y un cierto empeoramiento de sus ratios financieros y un 27,3% reporta reducciones en sus niveles de facturación y/o beneficios.
Del informe, además, se desprende que en torno al 55% de pymes vulnerables se ubica en Servicios a las empresas (32,7%) y Comercio y servicios personales (21,8%). Este resultado, a juicio de Cesgar, alerta sobre el impacto de la crisis sobre sectores que no han sido directamente afectados por las medidas de control de la pandemia, pero sí por la incertidumbre y el cambio en los hábitos de consumo asociados a ésta.
AUMENTA EL USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS
El informe también señala que ha habido una mayor utilización de productos financieros por parte de las pymes durante los últimos doce meses, correspondientes con el periodo de pandemia, especialmente de aquellos vinculados a la financiación del circulante.
Estos productos financieros se han usado, en gran medida, para mejorar la situación del activo circulante (76,1%), algo que ha granado gran peso frente a la situación antes de la pandemia.
En importancia, le sigue la financiación destinada a inversión (27%), tanto en equipo productivo como en inmuebles. También aumenta considerablemente, frente a los datos prepandemia, el número de pymes (3,7%) que ha destinado la financiación a abordar un proceso de expansión en el mercado nacional.
Respecto a las dificultades para la financiación, el obstáculo más importante sigue siendo la falta de garantías solicitadas (18,3%), con una relevancia también muy parecida a la observada en la edición anterior (17,2%). Le sigue en importancia el precio de la financiación (16,1%), aunque este motivo ha perdido peso con respecto a 2019 (19%).
Además, aumenta el número de empresas que señala como principales obstáculos los trámites administrativos y la falta de solvencia de las empresas (7,4%) y disminuye considerablemente el porcentaje de empresas que considera que las entidades financieras no comprenden adecuadamente sus negocio.
AUMENTA CONSIDERABLEMENTE EL USO DE LÍNEAS ICO
El crédito comercial (24,2%) y los préstamos bancarios (23,9%) han sido los productos más utilizados, seguidos muy de cerca de las líneas de avales del ICO (22,5%), cuyo uso se incrementa considerablemente. En cuarta posición, en cuanto a niveles de uso, se situarían las líneas de crédito bancario (21,5%). Por último, el leasing observa un crecimiento significativo en sus niveles de utilización del 9,4% en 2019 al 12,5% actual.
Este estudio también analiza el porcentaje de pymes que ha utilizado Líneas ICO en los últimos doce meses, que se ha multiplicado por más de cuatro respecto al nivel prepandemia y se sitúa en el 22,5%, por lo que casi una de cada cuatro pymes ha contado con financiación ICO. Los sectores de actividad más afectados por las restricciones a la movilidad y los aforos, como Transporte (46,4%), Hostelería y restauración (44,2%), son los que más han utilizado estas líneas.
Asímismo, este estudio señala que el 76% de las pymes está satisfecha con la cuantía recibida por estas líneas y el 83,1% considera que los plazos de devolución son adecuados para su empresa.
Por su parte, un 36% de las pymes afirma que le han solicitado aval o algún tipo de garantía para acceder a este tipo de financiación. En cuanto a las necesidades futuras de las empresas, una de cada cinco pymes usuarias de Líneas ICO cree que necesitará ampliar la cuantía de las mismas, y un 23,9% requerirá ampliar los plazos de devolución. Por último, un 13,5% de ellas cree que va a necesitar avales o garantías para renegociar la financiación ICO.
CASI LA MITAD DE LAS PYMES SE MUESTRA OPTIMISTA
En otro orden de cosas, el estudio señala que el 47,7% cree que su facturación aumentará en los próximos 12 meses. Esto es significativo, teniendo en cuenta que en 2020 el tamaño medio y facturación de las pymes se redujo considerablemente. El porcentaje de aquellas empresas que considera permanecerá estable desciende ligeramente, del 43,9% en 2020 al 41,0% en junio 2021, mientras que se reduce significativamente el peso de las empresas que creen que su facturación va a decrecer.
Por último, en cuanto a las perspectivas de creación de empleo, un 78,9% de las pymes considera que no aumentará su plantilla y que el empleo permanecerá estable en los próximos 12 meses, mientras que tan sólo un 12% de éstas cree que creará puestos de trabajo.