La empresa japonesa Fast Retailing, dueña de la cadena de ropa Uniqlo, se anotó un beneficio neto atribuido de 175.684 millones de yenes (1.335 millones de euros) en el conjunto de su año fiscal, finalizado en agosto, lo que equivale a casi duplicar las ganancias contabilizadas durante el ejercicio anterior, según se desprende de las cuentas que ha publicado este jueves la compañía.
La facturación de la firma en el conjunto del año fue de 2,132 billones de yenes (16.203 millones de euros), un 6,2% más. Por segmentos de negocio, las ventas de Uniqlo en Japón crecieron un 4,4%, hasta 842.628 millones (6.404 millones de euros), mientras que en el resto del mundo se situaron en 930.151 millones de yenes (7.069 millones de euros), un 10,2% más.
Por otro lado, los ingresos procedentes de su segunda marca, Gu, crecieron un 1,4%, hasta 246.091 millones (1.870 millones de euros), al tiempo que la facturación del resto de marcas globales se contrajo en un 1,3%, hasta 108.204 millones (822 millones de euros).
En el conjunto de los 12 meses fiscales, Fast Retailing contabilizó unos costes asociados a las ventas de 1,059 billones de yenes (8.048 millones de euros), un 2,5% más, mientras que los costes de venta, generales y administrativos se situaron en 818.427 millones (6.220 millones de euros).
La empresa ha acordado pagar un segundo dividendo trimestral de 240 yenes por acción (1,82 euros), por lo que la remuneración total a los accionistas a través de este tipo de reparta alcanza los 480 yenes (3,65 euros) por título durante el año fiscal finalizado en agosto, la misma cantidad que el ejercicio anterior.
Para el presente año fiscal, que finaliza en agosto de 2022, Fast Retailing espera alcanzar una facturación cercana a los 2,2 billones de yenes (16.720 millones de euros) y un beneficio neto atribuido en el entorno de los 175.000 millones (1.330 millones de euros).