Las consecuencias del estallido de la burbuja inmobiliaria todavía tiene repercusión en la actualidad. Una de ellas es la falta de especialistas, sobre todo los ferrallistas. La escasez de oferta ha elevado sus sueldos y las constructoras comienzan a bromear con la posibilidad de que vengan a trabajar subidos en un despampanante Ferrari. Sus sueldos comienzan a alcanzar los de antes de la crisis.
«Se buscan 40 ferrallistas para obras en Gibraltar». Este anuncio se puede encontrar en un portal de empleo en internet. Pero es sólo uno de los muchos que se pueden encontrar en la red de redes. El trabajo comienza a florecer en el real estate y ya escasea la mano de obra. De hecho, ya se producen las primeras fugas de una obra a la otra por el aumento de la competencia salarial entre las constructoras e inmobiliarias. En todo este resurgir los más beneficiados son los ferrallistas.
«Ahí va el ferrallista con su Ferrari». Esta expresión comienza a escucharse por los círculos del sector en un tono de sorna. ¿El motivo? La ausencia de especialistas en la ferralla. Durante la época del boom inmobiliario este tipo de obrero ya escaseaba. De hecho, sus sueldos eran uno de los más elevados en los tiempos de bonanza del sector. Pero tras el estallido del ladrillo todo cambio: despidos masivos y rebajas de sueldos para los más afortunados que lograron mantener su puesto de trabajo.
Todos los empleados ‘expulsados’ de la obra por la llegada de la crisis económica no tuvieron más remedio que reciclarse. Por este motivo, en la actualidad falta mana de obra cualificada. Las constructoras, buscan y rastrean, pero no encuentra. Llaman a los antiguos empleados a los que un día despidieron, pero el que no ha encontrado trabajo en otro sector ya está jubilado. De hecho, existen algunas compañías que buscan a sus trabajadores en Portugal, un país que vive un boom inmobiliario y donde sobra mano de obra.
«Necesito encofradores y ferrallas, imprescindible experiencia, para incorporación inmediata, contrato laboral para jornada completa de larga duración, muy buenas condiciones. Trabajo en Islas Canarias». Este es otro de los anuncios que se pueden encontrar en internet y en que lo más importante e «imprescindible» es la experiencia. Pero esta premisa es una verdadera utopía en la gran mayoría de ocasiones, porque los ferrallistas que han aguantado el tirón de la crisis -es decir, profesionales con experiencia- están muy demandados e incluso de obra en obra en busca de unas condiciones laborales mejores.
De todos modos, este ‘boom’ de los ferrallistas no es sino una consecuencia de la recuperación del sector. De hecho, el empleo en real estate vive un gran momento. En un mes dulce para la economía española, las actividades inmobiliarias continúan creando empleo a ritmos de más del 7%. En julio, el sector creó otros mil nuevos puestos de trabajo, permitiendo al real estate superar los 140.000 afiliados en toda España, según datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.
En el séptimo mes del año, el empleo en las actividades inmobiliarias (categoría correspondiente a servicios vinculados con el real estate) ganó 1.107 nuevos profesionales que en el año anterior, hasta alcanzar una media mensual de 140.569 trabajadores. En términos interanuales, el empleo en el sector aumentó un 7,4% en julio. En los últimos doce meses, el real estate ha ganado 9.634 nuevos afiliados.
NO SÓLO GANAN LOS FERRALLISTAS
La subida interanual en julio quedó ligeramente por debajo de la cifra de junio, la más alta de los últimos doce meses con 9.715 nuevos afiliados y un incremento del 7,5%. Las actividades inmobiliarias comenzaron el año con una subida del número de afiliados del 5,8% en enero, misma cifra que en 2017. En febrero y marzo, el empleo en el real estate subió un 5,9%, para pasar al 6% en abril y acelerarse hasta el 7,3% en mayo.
Asimismo, junto a la mejora de las actividades inmobiliarias, la reactivación de la obra nueva está también aumentando la creación de empleo en la construcción de edificios. La obra vuelve a atraer a miles de trabajadores y el sector ya cuenta con 443.176 afiliados.