El otoño está aquí con todos los fenómenos asociados a esta estación, y de hecho desde hace unos días, las lluvias y las precipitaciones están azotando casi toda la geografía peninsular. La ‘gota fría’, más formalmente denominada como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), es muy frecuente en el mes de septiembre y suele provocar tormentas y lluvias muy intensas, que pueden alcanzar una media de entre 50 y 100 litros de agua por medio cuadrado en solo una hora. Uno de los problemas principales de este fenómeno, además de las inundaciones, es que la conducción se puede volver complicada y peligrosa.
1LA GOTA FRÍA Y EL ‘AQUAPLANING’
Las personas que viven en zonas habitualmente lluviosas, como el Norte de España, o en regiones afectadas por la gota fría, como Comunidad Valenciana, Murcia, Almería o Baleares, deben estar muy pendientes de los riesgos de conducir con lluvias, y especialmente del fenómeno conocido como ‘aquaplaning’ que ocurre cuando el asfalto está mojado y los neumáticos pierden el agarre y no responden como deberían. Esto puede provocar pérdidas de control, deslizamientos y accidentes de distinta gravedad.