El sistema de robo conocido como el escalo, es de los más comprometedores para los usuarios, a pesar de que se trate de un método simple y a primera vista fácil de evitar
La peligrosidad de este sistema es que muchas personas no saben que, en su propio apartamento, existen lugares por donde pueden colarse los amigos de lo ajeno. Además se trata de situaciones difíciles de prever, ya que cuando se está de vacaciones en un inmueble que no se conoce, se escapan muchas de sus particularidades. Una de ellas puede ser la presencia de una ventana accesible a los delincuentes, una ventana o galería de la que cualquiera ni tan siquiera sospechaba de su peligro. Es fácil encontrarse con usuarios que, residiendo temporalmente en un apartamento o en una vivienda vacacional, no saben exactamente a qué se exponen.
Es claro que la puerta principal debe ser de calidad. También hay que tener en cuenta que muchos de los robos cometidos en apartamentos durante el verano, se dan por una falta de cuidado por parte de los propietarios. Estos deben mandar llamar a un cerrajero y colocar en ventanas y balcones persianas o material específicamente adecuado para ello, como pueden ser las persianas de tijera o extensibles. Tal montaje correrá a cuenta de cerrajeros contratados por el propietario, pero los usuarios o arrendatarios también deben estar alerta. Se aconseja no veranear en edificios mal protegidos, ya sea en la puerta de entrada, en las puertas secundarias (garaje, por ejemplo) o en las ventanas.
Las personas que se disponen a disfrutar unos días de playa o montaña miran muchos aspectos del lugar en donde van a residir por un tiempo: situación, precio etc. pero nunca hay que olvidarse de la protección contra los ladrones y por supuesto del método del escalo. Hay que decir, además, que este procedimiento es uno de los más simples para cometer entradas fraudulentas, entradas que en estos casos se producen habiendo o no personas en el interior de los apartamentos.
Fuente Comunicae