La Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae), tras una semana desde la entrada en vigor de la Ley Rider, ha denunciado que Glovo está jugando de «manera abusiva» con los algoritmos de sus repartidores para burlar la presunción de laboralidad y seguir usando fraudulentamente el trabajo autónomo. ,Reclaman a la Inspección de Trabajo que redoble los esfuerzos para evitar los abusos de las plataformas de reparto.
La organización de autónomos considera en un comunicado que la nueva norma supone «un primer paso muy importante» en la lucha contra el uso fraudulento que estas multinacionales hacen del trabajo autónomo para negar derechos a sus trabajadores.
La secretaria general de Uatae, María José Landaburu, ha lamentado que «muchos de estos buitres digitales no están dispuestos a cumplir la ley sin más, por lo que es imprescindible un refuerzo en la Inspección de Trabajo para hacer valer la normativa».
Uatae ha reflexionado sobre lo «significativo» que resulta que solo una de las grandes plataformas de ‘delivery’, Just Eat, esté negociando ya con los sindicatos el primer convenio colectivo del sector, mientras que Deliveroo anunció que abandonaría su actividad en España para evitar ceñirse a la ley.
«Que haya solo una compañía cumpliendo claramente con la ley es lamentable, pero a la vez evidencia que el problema no es intrínseco a la naturaleza de la actividad ni de modelo de negocio, sino de prácticas deliberadamente abusivas disfrazadas de innovación tecnológica», ha señalado Landaburu.
Respecto a Glovo, la organización de autónomos ha denunciado que la plataforma, que anunció que solo contratará en plantilla a un 20% de sus ‘riders’, está «jugando de manera abusiva con los algoritmos con los que organiza la asignación de repartos», sometiendo a los repartidores a una «subasta a la baja» en las tarifas aplicadas para, por un lado, abaratar costes y por otro lado, dar una «apariencia de flexibilidad» que permita revertir la presunción de laboralidad y mantenerles como falsos autónomos.
Sin embargo, la presión y movilización de los propios ‘riders’ en los últimos días ha revertido en parte estos cambios de algoritmo, pero Uatae recuerda que «hay que dar seguridad jurídica y certeza a las expectativas de estabilidad y derechos de estos trabajadores, que siguen estando en un limbo por los incumplimientos de Glovo».
Landaburu asume que las deficiencias estructurales de la Inspección de Trabajo, con una plantilla mermada tras años de recortes de los gobiernos del PP, «no van a resolverse de la noche a la mañana» y reconoce que el actual Ministerio «está haciendo un esfuerzo importante, pero urge redoblarlo fijando el cumplimiento de esta nueva norma como una prioridad, para así atajar cualquier tentativa de sentimiento de impunidad por parte de las plataformas que pueda asentarse».