El grupo alemán de ingeniería Bosch planea vender su división de tecnología de embalaje que generó 1.3 billones de euros en ventas el pasado, para enfocarse en su negocio principal.
Según declaró Bosch en un comunicado, las principales operaciones farmacéuticas y de envasado de alimentos no tienen suficientes sinergias con las otras áreas del fabricante y pueden competir más eficazmente fuera del grupo. Sin embargo, Bosch sí que mantendrá la parte más pequeña del negocio, Robert Bosch Manufacturing Solutions, que fabrica maquinaria para el propio negocio automotriz de Bosch.
“Esta decisión permite a Bosch enfocarse más en temas futuros como la transformación del grupo y la alineación hacia la digitalización como el internet de las cosas”, según declaró Stefan Hartung, miembro del directorio de Bosch. Y añade, “la unidad de tecnología de envasado y Bosch se beneficiará de esta decisión”.
Bosch, que es el mayor fabricante de partes de coches del mundo, se embarcó en una importante revisión de sus extensas operaciones bajo la dirección del presidente ejecutivo Volkmar Denner, para aprovechar así el crecimiento en áreas como vehículos eléctricos y vehículos autónomos. La renovación llevó a la venta de una empresa conjunta de turbo sistemas con Mahle GmbH el año pasado, y a una división compleja de motores de arranque que finalizó hace seis meses.
Asimismo, la unidad de tecnología de empaquetado de Bosch tiene 6,100 empleados en 15 países. El negocio consiste en producir maquinaria para la industria farmacéutica, alimentaria y de confitería. Bosch también fabrica una amplia gama de productos, desde máquinas de café y frigoríficos hasta herramientas eléctricas.
Hartung declaró que Bosch tiene la intención de vender el negocio de tecnología de embalaje a un solo comprador, y anticipa que el proceso de venta durará poco más de un año. Hasta el momento la compañía no ha mantenido conversaciones con ningún posible comprador y se espera que el futuro propietario mantenga sus 6.100 empleados.
Christoph Rauwald para Bloomberg