Alsa obtuvo un beneficio neto de 1,5 millones de euros en los primeros seis meses del año, que contrasta con las pérdidas de 38 millones de euros del mismo periodo del año anterior, cuando la paralización del transporte durante el primer confinamiento lastró sus cuentas.
Esta vez, con el levantamiento de las restricciones tras el fin del estado de alarma el pasado mes de mayo, la compañía deja atrás las pérdidas, si bien todavía no alcanza los 47 millones que ganó en el primer semestre de 2019, ya que los primeros meses del año aún se vieron significativamente afectados por la pandemia.
Actualmente, la compañía opera en torno al 55% de los servicios que tenía en 2019, con una ocupación que alcanza el 60% y que prevé que se impulse hasta el 70% con la reactivación de los viajes de verano, según informa National Express, compañía británica propietaria de la empresa española de transportes.
Los ingresos de la española crecieron en este periodo un 7,6%, hasta 340 millones de euros, al mismo tiempo que el beneficio operativo pasó a terreno positivo, a 23 millones de euros, con un margen del 6%, frente al negativo del 2,6% del año pasado.
Alsa también hace alusión en su cuenta de resultados al potencial impacto de la entrada de nuevos operadores en la alta velocidad ferroviaria, como Ouigo, que se estrenó en mayo: «Esperamos ver un crecimiento significativo en la demanda para nuestros servicios de larga distancia durante los meses de verano, a pesar del aumento de la competencia del tren de alta velocidad de bajo coste».
La compañía también ha completado un programa de reestructuración que ha supuesto la reducción del 30% de los costes y lograr un mayor saneamiento en la estructura organizativa, la mejora de los procesos y una mayor eficiencia. El objetivo es reducir 25 millones de euros anuales este tipo de costes.
PÉRDIDAS EN LA MATRIZ
En su conjunto, el grupo National Express perdió 24,1 millones de libras (28,3 millones de euros) en este primer semestre y obtuvo unos ingresos un 3,8% inferiores, de 1.000 millones de libras (1.175 millones de euros).
No obstante, logró disparar su resultado bruto de explotación (Ebitda) un 45,2%, hasta los 128,2 millones de libras (150 millones de euros), y cerrar junio con 1.175 millones de euros de liquidez, sin necesidades de refinanciación hasta el año 2023.
«Estamos completando el trabajo de revisión comercial y está claro que tenemos por delante importantes oportunidades de crecimiento rentable. Espero poder comunicar nuestros hallazgos y prioridades en otoño. A medida que se eliminen las restricciones en cada uno de nuestros mercados, veremos una fuerte recuperación tanto en la demanda de nuestros servicios como en nuestros resultados financieros», señala el presidente de National Express, Ignacio Garat.