Los riesgos del mercado de lujo parecen un nicho para algunos, y es por eso que las ideas e innovaciones adoptadas por las compañías de ese entorno realmente van más allá de lo «común» en busca del cliente que siempre tiene dinero. Con la llegada de un nuevo año muchos son los que se preguntan qué acciones y medidas se convertirán en práctica en 2017.
La búsqueda del «yo» esencial
Hay personas satisfechas consigo mismas y luego hay las que se van a casa en búsqueda de un «nuevo yo». Para estos últimos, hay un enorme abanico de posibilidades en el mercado de lujo. En 2017, la filosofía será «Mi cliente desea saber quién es; mi función será hacerle mejorar«.
Con esto en mente, es más fácil pensar en productos, servicios y experiencias innovadoras que combinan la búsqueda de clientes con sus requerimientos de lujo. Si el proyecto está todavía sin terminar, algo como «estoy haciendo algo especialmente para ti», mucho mejor.
Los que se quedan en el Mandarin Oriental en Barcelona, por ejemplo, tienen a su disposición paquetes que tienen hasta «entrenadores personales» y actividad física personalizada (el más barato cuesta 2.000 para dos personas). El futuro se basa en las experiencias del consumidor, el cliente del futuro quiere compartir nuevas historias y sentimientos positivos.
La importancia de los datos
Los consumidores saben que sus datos serán utilizados por las tiendas para conseguir clientes potenciales o tener acceso a una información valiosa para el mercado. Sin embargo, los hackers también son conscientes de ello y harán cualquier cosa para leer los datos, sobre todo cuando se trata del mercado de lujo. ¿Entonces que hay que hacer para sobresalir entre ese público ? Proporcionar seguridad, protección y más seguridad.
Aunque dependa de las tecnologías, la idea real es ofrecer al cliente un estado de paz. El cliente debe mantener la conciencia tranquila a la hora de comprar un nuevo producto o servicio.La famosa marca de joyería Bvlgari, por ejemplo, lanzó la aplicación «Bvlgari Vault» para las transacciones electrónicas. Se mantiene la información del usuario en una caja fuerte de máxima seguridad en Suiza. Para acceder a estos datos, el cliente debe seguir una serie de protocolos de seguridad, como el reconocimiento facial y de huellas digitales.
Clientes sin culpa
Sólo por mencionar un ejemplo: en junio de este año, la revista Fortune publicó una encuesta que muestra que 17 nuevos millonarios se han sumado a la «The Given Pledge«, grupo iniciado por Warren Buffett y Bill y Melinda Gates y cuyos miembros super ricos disponibilizan sus fortunas a causas sociales.
La pregunta es ¿Y por qué lo hacen? Hoy en día, las marcas se evalúan no sólo por la calidad de sus productos, sino también por las ideas que promueven. Y no hay ningún cliente satisfecho con una marca que le hace sentirse culpable. El cliente quiere vivir libre de culpa.
Un buen ejemplo es Diamond Foundry, una empresa estadounidense que fabrica diamantes cuya composición es idéntica a los materiales que se encuentran inicialmente en los países africanos. Con esto, la empresa suministra el mercado de joyería y, al mismo tiempo, ofrece un producto producido sin explotación de la mano de obra.
La extravagancia
Algunas de las facilidades de nueva creación, como Uber, ofrece algo antes reservado al mercado de lujo: además de total libertad, un sentido de «ser el jefe». Pero quien siempre ha formado parte de los sectores más ricos de la población siempre ha experimentado una visión de exclusividad. Entonces, ¿cómo atraer a este público?
Una empresa en Cancún tuvo la siguiente idea: ¿por qué no ofrecer servicios de taxi en coches de lujo, todo a través de aplicaciones móviles? El resultado fue la creación de la aplicación «Quiero Taxi Exótico» que ofrece a los turistas, sobre todo coches como Ferrari, Lamborghini y Mercedes-Benz. Los precios obviamente varían de acuerdo con el vehículo elegido.
Los nuevos modelos demográficos
Para establecer estrategias de ventas, la tendencia es, cada vez más, dejar a un lado los viejos modelos basados en la edad, el género, la ubicación y los rendimientos. El próximo año reserva nuevos retos a las empresas dedicadas al lujo: crear nuevas formas de evaluar a su público, incluyendo la adopción de nuevas posturas frente a sus clientes.
No es fácil, pero Lamborghini parece haber entrado en esta nueva era. La marca apuesta en un SUV, que será lanzado en 2018, dirigido a las mujeres (tanto solteras como con familias constituidas), lo que contrasta con su logotipo, un toro. «Un toro es siempre agresivo, pero me gustaría introducir una nueva filosofía para nuestro futuro: un toro puede ser agradable también, » esto con la finalidad de llegar al público femenino que es aproximadamente el 5% de los consumidores totales de la empresa.