La dirección de Tubacex ha informado al comité de empresa de las plantas en Llodio y Amurrio su decisión de no readmitir en sus puestos a los 129 despedidos que fueron incluidos en el ERE, según han confirmado fuentes sindicales.
Con esta decisión, la empresa, al igual que hizo PCB, filial de ITP, tras otro fallo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que también declaró nulos sus despidos, abonará los sueldos de los despedidos pero los mantiene en sus casas sin reincorporarlos.
El pasado viernes, y tras hacerse público el fallo que daba cinco días a la empresa para ejecutar la sentencia, la dirección emplazó a una reunión al comité para este martes donde les daría a conocer su decisión final.
Los sindicatos hicieron público su intención de que, en el caso que la empresa no incorporara a los despedidos, ellos, por su parte mantendrían la huelga indefinida iniciada en febrero y que supera los 150 días.
Por otro lado, la empresa anunció un recurso ante el Supremo, por lo que mantendrá a los trabajadores despedidos en sus domicilios hasta que dicho tribunal se pronuncie.
Las dos sentencias del TSJPV declaraban nulos los despedidos porque, a su juicio, las pérdidas económicas del grupo no son «coyunturales» como argumenta la dirección, sino motivadas por la crisis económica vinculada a la pandemia y la caída de la actividad.