AEB vs CECA: el sillón único, gran obstáculo para la fusión

El sector financiero español viene experimentando desde 2007 una reducción del número de entidades financieras, ya sea en Ahorro, en Banca o en Rurales y Cooperativas de crédito.

Cada subsector ha venido experimentando una disminución en el número de entidades, lo que ha propiciado el mismo pensamiento en diferentes ámbitos de las finanzas españolas: si el sector cuenta con menos entidades, tiene lógica que, dejando a un lado las patronales de las cajas rurales, se apueste por la unión de la Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) en una sola patronal. Uno de los grandes problemas que tiene está operación es que no hay sillones para colocar a los dos equipos.

Esta unión presenta dificultades por cuestiones como el modelo de hacer banca, las heridas de guerra que dejó la crisis del sector financiero en 2008, la fuerza que podría perder el sector financiero español en instituciones exteriores si se fusionan la AEB y la CECA y el sillón único y la cuota de poder en una hipotética patronal fusionada. 

En relación con este último punto, el tema es que cada patronal tiene sus equipos y en una fusión de las dos, no cabrían todos. El problema de quién se queda el sillón de mando único es relevante y el reparto del resto de puestos también. En teoría no habría sitio para todos y este punto hace que la fusión pueda no ser apetecible para nadie.

En la CECA no se han venido pronunciando en público sobre la posibilidad de que haya una fusión con la AEB, mientras que, en el caso de la patronal de banca lo más parecido a apostar la fusión lo dijo en 2018 el máximo responsable de la AEB, José María Roldán, que, entonces, señaló que “ya todas las entidades son bancos” y que “tienen modelos de negocio parecidos y por tanto intereses similares”. Hasta la fecha, casi nada más.

Roldán termina su segundo mandato en abril de 2022 y hace menos de un mes que anunció que no se presentará a la reelección, mientras que, en el lado de la CECA, el mandato del número uno de esta patronal, Isidre Fainé, termine en abril del año que viene. Está por ver si esa fusión de la AEB y CECA se produce y si esta unión se lleva a cabo, si lo hará en lo que le queda de mandato a los máximos responsables de estas dos patronales.

LA VOZ CANTANTE EN LAS PATRONALES

De cara a una operación de este tipo, hay que pensar a quién beneficiaría o perjudicaría una fusión, ya que, a priori, solo habría un sillón de mando y se reduciría el número de sillones restantes ya que sólo habría un equipo que acompañaría al presidente de la patronal resultante.  

En la patronal de banca la voz cantante es la Santander y BBVA, mientras que en la CECA, el mando, sobre el papel, es de CaixaBank, más aún ahora que ha absorbido Bankia. Si hubiera una fusión de AEB con CECA, el papel de la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri sería, a priori, menos predominante que en la CECA, mientras que la voz de las otras entidades que están en la CECA se diluiría mucho. Esto hace pensar que a la CECA puede que no le interese una fusión con la patronal de los bancos.

Otro aspecto que puede dificultar la fusión es el modelo seguido por las entidades que forman parte de estas dos patronales. Las entidades de la CECA presumieron -aún lo hacen- de tener un modelo que es diferente a las entidades que forman parte de la AEB: un modelo más social. La crisis y el mal gobierno de muchas cajas acabaron con estas entidades de ahorro casi al completo. Muchas fueron absorbidas por bancos y otras se tuvieron que convertir en bancos.

En lo peor de la crisis, la población cargó contra el sector financiero y los bancos siempre trataron de diferenciarse de las cajas, a las han venido culpando del desastre del sector financiero español.   Esto es algo que no olvidan en el sector de Ahorro. Esa culpabilización nunca gustó en el ámbito de las antiguas cajas porque no todas se comportaron igual y porque les dejó a los pies de los caballos. Pese a todo lo que ha pasado, aún hoy desde lo que fueron en su día las cajas, defienden que tienen un modelo más social por las propia idiosincrasia de las entidades, con la Obra Social y las fundaciones.

RELEVANCIA INTERNACIONAL

El tercer punto que puede hacer que AEB y CECA se lo piensen mucho antes de fusionarse es que, por separado,ambas organizaciones tienen una presencia internacional muy relevante. Así, Isidré Fainé, el presidente de la CECA, ha llegado a encabezar el  Instituto Mundial de Cajas (WSBI, por sus siglas en inglés), mientras que la número uno de Banco Santander, Ana Botín es la presidenta de la Federación Bancaria Europea (EBF) hasta 2023.

Esta fuerza del sector financiero español se reduciría, salvo sorpresa, en caso de que la AEB y la CECA se convirtieran en una sola patronal.

Está por ver qué opina el Gobierno sobre esta posible unión y también falta un pronunciamiento público del Banco de España. Al respecto, según Voz Pópuli, el organismo del que es gobernador Pablo Hernández de Cos está de acuerdo con fusión de patronales y, de hecho, está dentro de las negociaciones para que la fusión salga adelante. Según este medio, esta operación “aún se encuentra en una etapa muy temprana, pero la salida de José María Roldán, actual presidente de la AEB, también podría ser un aliciente para que entrara una persona independiente y así unir a ambas patronales. Este sería uno de los motivos por los que Roldán habría anunciado su salida con tanto tiempo de antelación”.

OTRAS VALORACIONES

En este punto, sin llegar a estar alarmados, las centrales sindicales empiezan a moverse.  Así, fuentes del sindicato FINE ha señalado a MERCA2 que van a hablar con la AEB y la CECA para que les cuenten qué hay en relación a una posible fusión de estas dos patronales.

A los sindicatos les preocupa lo que pueda pasar con la fusión por la repercusión que pueda tener en los convenios colectivos de Banca y Ahorro, que están en vigor hasta que termine 2023, mientras que los mandatos de los presidentes de la AEB, José María Roldán, y la CECA, Isidre Fainé, vencen en abril de 2022 y febrero de 2022, respectivamente.

En relación con los convenios, fuentes del sindicato FINE apuntan que “son unos derechos adquiridos porque están firmados y se tienen que respetar, pero, por precaución, por un tema de seguridad jurídica, vamos a preguntar a los abogados”.

Por su parte, en el ámbito de UGT consideran que «por seguridad jurídica si las patronales se fusionan, tendrían que hacerlo antes de que se venzan los convenios colectivos». “Lo lógico es que primero haya una única patronal y luego venga un convenio único. Es un tema de seguridad jurídica”, señaló a MERCA2 una persona que estuvo muchos años vinculada a UGT en el sector financiero. “Puede ser que hubiera dos patronales para negociar un solo convenio, como pasa en la mesa de Rurales, pero lo veo muy improbable en el caso de la AEB y la CECA”, agregó.

En los sindicatos FINE y UGT comparten que sobre la fusión de las AEB y la CECA lo único que ha habido son rumores. “Son dos sectores en cuyas patronales mandan entidades muy grandes que no creo que quieran perder su poder”, indicaron en FINE en referencia a la fuerza de Santander y BBVA en la patronal de Banca y a la fuerza de CaixaBank en la de Ahorro, una patronal en el que ahora tiene aún más fuerza tras haber absorbido Bankia, la otra gran entidad de ahorro. En UGT también comparten esta visión: «La fusión de las patronales AEB y CECA hasta la fecha ha sido como vender humo», vienen a decir en UGT.