Iberdrola ha mostrado sus cartas en México durante los primeros meses de este 2021. Así, el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), lanzó una dura ofensiva mediática contra la firma española que culminó con la aprobación de una reforma energética que afectaba directamente a su negocio. Un agravio al que la compañía eléctrica ha respondido con un aluvión legal, junto a otras empresas que se han visto perjudicadas, y un drástico recorte en la energía que provee a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la firma pública mexicana encargada de la generación y la distribución de la electricidad.
La compañía vasca es uno de los mayores proveedores de energía, y el primero en fuentes renovables, de la CFE. Una alianza que nació hace años a raíz de una reforma energética, ejecutada por gobiernos mexicanos anteriores al actual, por la que la empresa pública estaba obligada a comprar primero la electricidad proveniente de fuentes renovables. Con ello, se conseguía un mejor trato para el medioambiente, dentro de la lucha contra el Cambio Climático, y generar un incentivo para que las empresas invirtieron en estas tecnologías limpias.
Así, Iberdrola fue una de las más aventajadas gracias a sus años de experiencia en el sector renovable. Pero los incentivos también tenían un defecto de forma y, es que, estar obligado a comprar esa energía implicaba que no siempre fuera la más barata (dado que los costes hace años todavía eran altos). Un hecho que generó distensiones en las cuentas de la CFE y que llevó al gobierno actual a buscar una salida. Aunque la alternativa ha dejado mucho que desear. Tanto porque supone un agravio para el medioambiente, en el peor momento posible, como porque el cambio legislativo presenta enormes fallos legales.
LA REFORMA DE AMLO «PARALIZADA» POR LAS DEMANDAS
Precisamente, esos fallos legales son los que ha utilizado Iberdrola, y otras muchas firmas, para presentar un aluvión en contra de la normativa. Así, la compañía española explica que «debido a las importantes implicaciones que tiene la reforma diversos participantes del sector presentaron demandan de amparo». En concreto, entre el 10 de marzo, en el que entró en vigor la nueva regulación, y el 16 de abril se presentaron 131 demandas que se han traducido en 120 suspensiones provisionales y otras 11 definitivas.
Todo ello, ha hecho que en la práctica se haya «paralizado la aplicación de la iniciativa del Gobierno», según la eléctrica española. Pero el aluvión de demandas, en el que ha participado Iberdrola, no ha sido la única respuesta de Ignacio Sánchez Galán, presidente de la eléctrica española, ante los reproches y la medida unilateral de AMLO. Además, los resultados presentados en el primer trimestre muestran que la compañía redujo cerca de un 20% el suministro de energía a CFE. En concreto, las ventas de electricidad de la española a la firma pública mexicana ascendieron a 7.542 GW frente a los 9.335 GW registrados un año antes.
El grupo eléctrico español señala que dicha caída se produjo por el temporal de frío que asoló el Estado de Texas, en el mes de febrero, y que tuvo un impacto en el repunte del precio del gas. Con ello, se paralizó la producción de energía a través de los ciclos combinados. Pero una caída tan grande, casi 2 GW, no se puede explicar solo por ese efecto. De hecho, Iberdrola informó de que la producción térmica durante el primer trimestre del 2021 cayó ‘solo’ un 12,9% y, además, la española es el principal suministrador renovable.
IBERDROLA RECORTO LA ENERGÍA ‘PÚBLICA’ VENDIDA Y DISPARÓ LA PRIVADA
Además, la ola de frío supuso un problema económico para la compañía eléctrica española porque no pudo aplicar los elevados costes en la factura de la CFE. Así, Iberdrola registró una caída del 30% en la aportación que realizó su negocio en México en el margen bruto del grupo, respecto a hace un año. Una caída que se debe «fundamentalmente» al impacto de la ola de frío que «afectó al suministro y los precios de gas de algunas de las plantas de ciclo combinado», según la compañía.
Por el contrario, la firma española sí registró un fuerte crecimiento de las ventas de electricidad para sus clientes privados en México durante el primer trimestre del año. En concreto, Iberdrola registró un incremento de hasta el 29,4% un porcentaje que se sitúa muy por encima del registrado un año antes cuando apenas fue del 10%.
Los datos de este 2021 ponen de relieve el fuerte crecimiento en la región entre particulares, con un avance acumulado del 42,4% desde el 2019, y ponen en valor el negocio de la eléctrica en el país pese al golpe político recibido. Aun así los tribunales serán los que determinen cómo acaba todo y, con ello, que la compañía siga en el mercado azteca.