El 45,79% de las agencias inmobiliarias prevé aumentar su plantilla este año, según se desprende de una encuesta realizada por la Federación Nacional de Agencias Inmobiliarias (FAI) para radiografiar el estado de salud de las agencias inmobiliarias un año después de que estallara la crisis sanitaria.
Según la encuesta, a día de hoy, solo un 7,7% de los agentes inmobiliarios mantiene trabajadores en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), mientras que un 65,2% ya ha reincorporado a todos sus trabajadores y un 27,1% ha afirmado que no recurrió a los ERTE.
Teniendo en cuenta el volumen de negocio, el 51% de las agencias inmobiliarias ha afirmado que su nivel de facturación descendió en 2020 respecto a 2019, pero para casi el 37% fue superior y para casi un 13% se mantuvo en línea con la de un año antes.
Sobre las causas del descenso de facturación en 2020, el estudio indica que la principal causa fue la parálisis del mercado durante los meses de confinamiento domiciliario (para el 82,91% de los encuestados), seguido del descenso de las compraventas en su región en período Covid (según el 33,76%).
También lo achacan a factores ajenos al Covid, como lo fue el bajo inventario de inmuebles en la zona geográfica en la que opera la agencia, según el 14,53% de los encuestados.
Preguntados sobre las expectativas a cierre de este año a tenor de la evolución del sector y de los datos en el primer trimestre, un 89% cree que se mantendrá igual o crecerá este año.
Los confinamientos perimetrales han afectado ocasionalmente al 66,4% de las agencias inmobiliarias, pero para casi un 20% han impactado de forma «muy negativa». Por su parte, un 14,7% de los encuestados dice que no le ha afectado.
El barómetro FAI también ha señalado que el 50,7% de las agencias inmobiliarias encuestadas ha aumentado su inversión en nuevas tecnologías adaptadas a la digitalización de visitas o trámites de venta o alquiler de viviendas virtuales, aunque la visita física al inmueble y el cara a cara con un agente a la hora de tomar la decisión final de la compra o alquiler de una vivienda sigue siendo la tónica predominante.
No obstante, una de cada tres agencias encuestadas ha indicado que sí que ha cerrado operaciones sin la visita presencial por parte del cliente, con una media de operaciones cerradas del 5,2%.
Por último, el estudio realizado por FAI también recoge de qué manera el Covid ha cambiado el desarrollo de su profesión. Así, el 55,1% de los encuestados ha apuntado que en el tipo de citas con los clientes, relacionado con el uso de las nuevas tecnologías, el 46,7% que en una mayor posibilidad de conciliar la vida familiar con la profesional al poder optar por el teletrabajo y el 42,70% a la hora de seleccionar los clientes y los inmuebles.
El coordinador general de FAI, José María Alfaro, ha afirmado que el hecho de que un alto porcentaje de agencias inmobiliarias hayan sorteado la crisis económica derivada de la sanitaria «va en paralelo al buen comportamiento del mercado de las compraventas, pese al fuerte parón durante los meses de hibernación durante el confinamiento domiciliario».
Además, ha remarcado que la gran mayoría de las agencias inmobiliarias que sobrevivieron a la crisis del 2008 han mostrado «madurez, sentando unos cimientos fuertes en los últimos años, adaptándose a las nuevas necesidades del mercado y los consumidores, y apostando por las nuevas tecnologías, la formación y a la colaboración con otros profesionales del sector inmobiliario en beneficio de los clientes».