Telefónica rinde cuentas al mercado esta semana. Como el sector en su conjunto, los resultados serán bastante pelados. La guerra comercial pasa factura a todos los operadores de telefonía, y los márgenes se estrechan. Aunque nadie tiene la intención de parar la máquina de promociones.
Según ha podido saber MERCA2 en fuentes conocedoras del sector, se espera que los tres primeros meses de Telefónica sean planos o con un ligero retroceso. La compañía que dirige José María Álvarez-Pallete se verá impactada por un comportamiento muy tenue en Brasil y Alemania, y lo peor estará en España. Algo que empieza a no ser novedad.
También hay que tener en cuenta, señalan dichas fuentes, que el primer trimestre del sector telecos es tradicionalmente flojo. Sobre todo en desempeño comercial. Algo que se basa en pura estrategia de captación tras la marcha que se mete en el Q3 y Q4.
Para refrendar este comportamiento, los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) son muy claros. Telefónica ha perdido más de 10.000 clientes de banda ancha al mes en el primer trimestres de 2021 (saldo neto entre bajas y altas). Por lo que respecta a la tecnología de uso, el operador azul se ha dejado 69.600 usuarios de ADSL en el camino. En cambio, ha metido 50.300 nuevos abonados de fibra. Lógicamente se trata del trasvase que realizan todas las compañías para ajustar los precios de la factura con mejores servicios. Pero las cifras dejan un claro saldo negativo.
Asimismo, según los datos de la CNMC, Telefónica también habría tenido un retroceso en la captación de líneas móviles, que tendrían un saldo negativo en los primeros tres meses del ejercicio. Algo que se reflejará en los resultados globales si otros mercados no compensan la situación española.
TELEFÓNICA, EN MITAD DE LA GUERRA
La situación no pilla a nadie por sorpresa. De hecho, los discursos de los operadores ya están preparados; y las acciones de negocio con la diversificación de servicios, también. Esto se traduce en un 2021 que no será especialmente positivo para nadie. Escaso consuelo parece.
En este contexto, uno de los operadores que está metiendo más presión al mercado en los últimos trimestres, Digi, activó hace pocos días una promoción que retrata e ironiza con lo que sucede: la guerra de tarifas y la carrera por la captación de clientes a cualquier precio. Bien es cierto que todos los operadores presumen de generar más valor dentro de su cartera de usuarios, pero las cuentas no salen.
Así, Telefónica se ha visto presa de esta situación. Como exincumbente mantiene la base de clientes más alta de sector. Las bases de datos de sus usuarios son el caramelo de los ataques de marketing de sus rivales. ¿Pero hasta cuándo va a poder aguantar Telefónica? Es cierto que, efectivamente, el operador azul asume un incremento en la factura de sus clientes premium con, además, servicios añadidos. Pero la presión comercial cada vez es mayor.
Por si fuera poco, y pese a los alivios impositivos prometidos por el Gobierno, los próximos años serán intensos en capex, sobre todo en materia de 5G y el fin del despliegue de la fibra. Y todo eso hablando solo en España. Pero lo cierto es que dicha presión también empieza a ser latente en Brasil y Alemania; y también llegará a Reino Unido. Un reto para Telefónica que se conocerá desde esta semana.