La agricultura es la que nos da de comer a todos los habitantes del planeta, pero no es una actividad libre de provocar problemas en el suelo, sobre todo en los años en los que no hubo demasiado control en el uso de productos como los abonos o los pesticidas.
Además, en la actualidad la agricultura intensiva no es la mejor para la salud ambiental, de manera que se produce contaminación que afecta al propio agricultor, haciendo que los rendimientos bajen.
El sistema EBD soluciona el problema de la contaminación agrícola
Entre otros muchos usos, el sistema EBD de Agrosolmen sirve para remediar los problemas que la agricultura provoca en el suelo, los cuales se deben en gran parte a la formación de especies reactivas de oxígeno (conocidas como ROS) que destruyen la vida microbiana.
Estos microorganismos son los que se encargan de manera natural de eliminar la contaminación, algo que no pueden hacer si nuestras actividades acaban con ellos.
De esta manera, el sistema EBD hace que ese oxígeno reactivo que es muy oxidante se convierta en oxígeno “normal” (gracias al uso de una mezcla de minerales) no oxidante y que permite la proliferación de microorganismos.
La contaminación es el mejor alimento para estos organismos microscópicos, que una vez que están en un ambiente con un oxígeno no oxidante no paran de crecer y crecer restaurando el suelo agrícola.
¿Qué beneficios tiene el sistema EBD para la agricultura?
Un suelo que no está sano no es bueno para las plantas, de manera que el sistema EBD tiene muchos beneficios para el agricultor que van más allá de eliminar la contaminación.
En la mayoría de los casos, un suelo restaurado con todos sus microorganismos aumenta el rendimiento de los cultivos sin necesidad de invertir dinero en tratamientos, de forma que el sistema EBD es muy rentable.
También es capaz de controlar enfermedades bacterianas, virales y fúngicas, además de los insectos dañinos. Estos problemas afectan de forma muy negativa a la economía del agricultor, al tener que invertir grandes cantidades de dinero para la compra de los tratamientos a la vez que recoge una cosecha menor.
De hecho, la empresa desarrolladora del sistema EBD ha calculado que los agricultores pueden prescindir de los pesticidas e insecticidas en su totalidad, y de un 90% de los fertilizantes que suelen usar. Solo esto supone un aumento de las ganancias considerable, pues los agricultores saben muy bien lo que cuestan estos productos.
Entre todos estos beneficios nos gustaría destacar uno en concreto y es que el sistema es capaz de restaurar los suelos que han sido contaminados con metales pesados como el arsénico, el cobre o el zinc, recuperando estos suelos inservibles para la agricultura.
Remediar la contaminación con metales pesados es muy complicado, de manera que cualquier avance técnico que permita que los suelos vuelvan a ser viables tiene que ser celebrado por toda la comunidad agrícola.
Este sistema EBD viene a revolucionar el mundo agrícola, convirtiendo suelos enfermos por la contaminación en suelos sanos, algo que notará enseguida el agricultor con una bajada de costes y una mayor producción, ganando más dinero con el mismo trabajo.