La pandemia por COVID-19 ha impactado de manera negativa a diversos sectores laborales. En 2020 se incluyó a más de 750 mil trabajadores de empresas en el ERTE. Conoce de qué manera ha afectado el COVID-19 a los trabajadores discontinuos y si cuentan con algún tipo de ayuda para sobrellevar el impacto de la pandemia.
Situación actual de los trabajadores discontinuos con motivo de la pandemia
De los sectores más afectados por la pandemia, hostelería y turismo han sido los que han llevado la peor parte. Las medidas de contención generaron un impacto en la actividad económica, por cuanto muchas empresas enfrentan grandes tensiones de liquidez. Como medidas para la estabilización, con el fin de proteger el sistema productivo de España.
Ahora bien, la protección especial que se planteó durante la mayor crisis del estado de alarma sanitaria, había dejado en el limbo a miles de trabajadores en condición discontinua. Aunque el planteamiento legal que se estableció permitía que estos trabajadores con contratos fijos discontinuos pudiesen aprovecharse de una prestación extraordinaria.
El efecto del COVID en las empresas no se ha hecho esperar. Algunos empresarios han contraído importantes deudas que ponen en negativo sus ingresos. Por eso, muchos trabajadores discontinuos no fueron llamados a reincorporarse a las actividades, luego de que se eliminó el estado de alarma, proceder que se asimiló como el despido del trabajador.
En la ignorancia de sus derechos, estos trabajadores asumieron el despido, con las consecuencias económicas que esto supuso. Pero el tratamiento que se le dé al estatus laboral de estos trabajadores puede acarrear graves consecuencias legales.
En la web rellenardocumentos.es puede encontrarse ayuda extraordinaria para trabajadores fijos discontinuos, especialmente cuando se encuentran en situaciones laborales difíciles. Allí se muestran los tipos de ayudas que pueden obtener los trabajadores fijos discontinuos, cuando tengan que volver a realizar sus labores
¿Qué pasa si no se llama a un trabajador fijo discontinuo a volver a trabajar?
Ahora bien, los contratos fijos discontinuos permiten que el trabajador pueda prestar sus servicios a una empresa de manera fija, pero no continua en el tiempo y que no se repita en ciertas fechas. Una vez que terminó el período de alarma, estos trabajadores debieron haber sido llamados a la reincorporación de sus actividades con la empresa.
La falta del llamamiento, cuando excede el período de tiempo establecido legalmente, se consideraría un despido colectivo. Sin embargo, el Tribunal Supremo considera improcedente el mismo.
De no necesitar al trabajador fijo discontinuo, la empresa tendrá que informar a los trabajadores, justificando de manera objetiva la no reincorporación. Incluso, podrá optar por la inclusión al ERTE debido a causas de productivas y económicas, y no con motivo del COVID-19.
Lo cierto es que el futuro de la situación laboral de los trabajadores fijos discontinuos parece ambiguo. Tanto empresas como trabajadores tendrán que abocarse a una resolución que beneficie a ambas partes, de la mano de la negociación. De esta manera, poder mantener a flote las empresas y la actividad económicas, y salvaguardar el empleo de miles de ciudadanos.