Iberdrola ha anunciado este martes sus primeros tres proyectos de plantas fotovoltaicas en la Comunidad Valenciana, que supondrán una inversión de más de 235 millones de euros y sumarán una potencia instalada de 450 megavatios (MW), según ha informado la eléctrica en un comunicado.
La provincia de Valencia acogerá dos de las instalaciones, que estarán ubicadas en el Valle de Ayora-Cofrentes, mientras que la tercera se construirá en La Encina (Villena), en Alicante. Según la compañía, «esta apuesta por las energías renovables involucrará hasta a 1.450 profesionales, contribuirá a la reactivación de la economía local y ayudará a orientar a las empresas de la región hacia un sector con futuro».
La energética tiene prevista la construcción de dos plantas solares (PSF Ayora 1 y FV Cofrentes I) en el Valle de Ayora-Cofrentes, de 200 MW de capacidad instalada cada una, además de las infraestructuras de evacuación de energía, como una subestación y las líneas eléctricas necesarias para el transporte de la energía. La tercera instalación, de 50 MW (FV Alhorines), se ubicará en la pedanía de La Encina, en Villena.
Las tres plantas proyectadas sumarán casi un millón de módulos fotovoltaicos e involucrarán en periodos punta hasta a 1.450 profesionales. Los proyectos cuentan con acuerdos con «multitud» de propietarios de los terrenos en las diferentes zonas.
Una vez operativas, estas instalaciones generarán energía limpia para una población equivalente de más de 220.000 hogares y evitarán la emisión a la atmósfera de más de 140.000 toneladas de CO2/año.
La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán gestiona en la Comunidad Valenciana más de 2.000 MW de potencia instalada renovable, hidroeléctrica en concreto, como es el caso del complejo de Cortes-La Muela, la mayor central de bombeo de Europa.
Iberdrola ha destacado su convencimiento de que la transición energética «puede actuar como agente tractor clave en la transformación del tejido industrial y en la recuperación verde de la economía y el empleo.
PLAN DE INVERSIÓN HASTA 2025
Para ello, la compañía ha lanzado un plan de inversión de 75.000 millones de euros para el período 2020-2025, con el objetivo de duplicar su capacidad renovable y aprovechar las oportunidades de la revolución energética que afrontan las principales economías del mundo.
Las inversiones en España para el período se elevan a cerca de 14.300 millones de euros y la mitad –más de 7.000 millones de euros– irán destinadas al desarrollo de nuevos proyectos renovables, mientras que más de 4.500 millones irán dirigidos a redes eléctricas.
Tras veinte años promoviendo la transición energética, Iberdrola tenía una capacidad instalada de más de 16.700 MW renovables a septiembre de 2020, un volumen que en el mundo se eleva a casi 35.000 MW, lo que convierte a su parque de generación en uno de los más limpios del sector energético.
Con unas emisiones de CO2/kWh, que son ya dos tercios inferiores a la media europea, la estrategia de inversión en energía limpia y redes llevará a Iberdrola a ser una compañía «neutra en carbono» en Europa en 2030.