Coca-Cola se plantea romper sus relaciones con Ecoembes, la firma que aglutina a las grandes generadoras de envases, según ha podido saber MERCA2. Una decisión que viene propiciada por el continuo deterioro de la imagen de la compañía sin ánimo de lucro, tras la aparición de una serie de estudios internacionales e informaciones en presa muy negativos acerca de su gestión. Además, la decisión de la reconocida marca de bebidas está secundada por otras grandes empresas, presentes en el organigrama del ente reciclador, que también sopesan su salida.
El principal detonante de la ruptura ha sido la publicación de dos informes internacionales que han dejado en muy mal lugar a la entidad recicladora. Así, a finales de 2020 una investigación elaborada por organizaciones de más de 15 países agrupadas bajo el nombre de Changing Markets culpaba directamente a Ecoembes, y con ella a las grandes empresas que tiene detrás como Coca-Cola, de presionar para anular futuras leyes medioambientales sobre reciclaje en España. En concreto, en lo referente a la implantación del llamado sistema SDDR (uso de envases retornables) que ya se está desarrollando en los países nórdicos.
Un mes después, Greenpeace volvía a dejar en a la compañía. Así, la ONG ambiental publicaba el informe «Ecoembes miente: Desmontando los engaños de la gestión de residuos de envases domésticos» en el que explica cómo las empresas adjudicadas por Ecoembes guardan, entierran y exportan plásticos de manera irregular, y pone de manifiesto que la entidad no recicla ni el 25% de los envases recogidos en el contenedor amarillo. Por último, las distintas informaciones que han aparecido en los medios por su gestión, los exorbitantes sueldos de sus directivos o sus problemas con Hacienda han terminado por convencer a las marcas de romper vínculos.
CRISIS INTERNA EN ECOEMBES
La aparición continuada de dichas informaciones ya provocaron un profundo malestar dentro de la compañía. Pero ha sido la postura de Coca-Cola y, por extensión, de otras marcas que podrían unirse las que han terminado por abrir una fuerte crisis interna dentro de la compañía, según ha podido conocer MERCA2. Al fin y al cabo, son dichos gigantes los que proporcionan la mayor parte del negocio que tiene la compañía, por lo que su salida podría ser dramática. Ecoembes, por su parte, señala que ninguna empresa del Consejo de Administración «ha manifestado» la voluntad de abandonar los órganos de gobierno.
Ecoembes es una empresa sin ánimo de lucro que se creó en 1996 para cumplir con las premisas impuestas por la llamada Ley de Envases. En pocas palabras, las obligaciones que tenían las grandes firmas de consumo de reciclar aquellos envases que utilizaban, que van desde cualquier tipo de plástico a las latas de aluminio, las llevó a crear dicho organismo para encargarse de esa tarea. De hecho, a lo largo de los años en el consejo de administración del ente verde se han sentado directivos de firmas como Danone, L’Oreal, Procter & Gamble y PepsiCo que ahora está al mando.
Con el tiempo, y apoyado por actores tan importantes, Ecoembes se fue convirtiendo en un monopolio excesivamente rentable. De hecho, en los últimos años su facturación se ha disparado y eso ha llevado a que una pequeña lista de directivos hayan engordado su cuenta corriente. Así, la remuneración total devengada (que incluye sueldos, Seguridad Social y primas de seguros) de los diez miembros de la alta dirección se disparó un 56,4%, al pasar de 1,47 a los 2,3 millones, entre 2014 y 2019.
COCA-COLA PODRÍA POTENCIAR LA LLEGADA DEL SISTEMA SDDR A ESPAÑA
Pero la salida del entramado de Ecoembes no significaría para Coca-Cola, y otras marcas que decidan seguirla, que se acabe su obligación de hacerse cargo de los residuos de sus ventas. Por ello, la compañía todavía no ha dado el paso adelante, dado que debe definir la nueva apuesta verde para dar cumplimiento con la actual “Ley de Envases”. Las opciones de la reconocida compañía pasan o bien por crear un nuevo sistema al que se adhieran otras compañías o bien potenciar su propia estrategia verde en la que ya trabaja a nivel global. Hasta la fecha no hay ninguna preferida, según a podido saber MERCA2, mientras que Coca-Cola ha preferido no hacer declaraciones al respecto.
Aunque sea cual sea la decisión lo que parece más factible es que se encamine hacía una solución bajo el método SDDR, según apuntan las fuentes consultadas. El Sistema de Retorno es una estructura de gestión de envases en el que se asocia un valor a cada recipiente para que éste sea devuelto por el consumidor para su reciclaje. En pocas palabras, bajo dicho sistema a los ciudadanos se les pagaría una pequeña cantidad por cada envase devuelto, con lo que se incentiva el reciclaje y se consigue hasta un 90% de eficacia. De ahí que sea uno de los sistemas más utilizados en regiones más desarrolladas ambientalmente como los países nórdicos.