Las pernoctaciones han sufrido un desplome del 85% en enero de 2021 respecto al mismo mes de 2020, por encima de la caída que habían sufrido en diciembre (-81,2%), según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Llegados a un punto desconocido tras descubrir el ‘turismo cero’ en plena temporada alta, en destinos como Canarias, y con las restricciones de movilidad mermando por días a los sectores vinculados al turismo -hoteles, hostelería pequeño comercio-, el Gobierno anuncia un nuevo fondo de 11.000 millones de euros para “nuevas actuaciones para empresas, pymes y trabajadores autónomos” vinculados a la primera industria de España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado en el Congreso de los Diputados que con estos recursos se buscará “reforzar la solvencia de los balances”, facilitar el retorno de la actividad, “hacer las inversiones necesarias” y la contratación de trabajadores.
El presidente del Gobierno ha destacado que, desde el inicio de la pandemia, el Ejecutivo ha comprometido en recursos el 20% del PIB en “un ejercicio de protección nunca antes visto”, entre financiación a través de los avales públicos del ICO, el sistema de protección de empleo de los ERTE y transferencias a las comunidades autónomas.
“Sólo el pago de los salarios de los ERTEs y las prestaciones asciende a unos 40.000 millones de euros de ayudas directas”, ha asegurado Sánchez. Asimismo, ha asegurado que las transferencias a las comunidades autónomas desde el inicio de la pandemia supera los 24.000 millones de euros, concebidas para reforzar la atención sanitaria pero también, ha dicho, para inyectar ayudas directas al ser las administraciones más cercanas y conocedoras del impacto de las restricciones aplicadas y, por tanto, las compensaciones que se debían derivar de ellas.
Sin embargo, la sensación en el sector turístico es que la reacción ha sido tardía e insuficiente. Tanto las grandes hoteleras como los pequeños negocios de la hostelería, el ocio nocturno o las agencias de viajes, ha reprochado desde el inicio de la crisis la falta de ayudas específicas para sectores que han tenido que cesar su actividad.
Los segmentos empresariales que centran su modelo negocio en la actividad derivada de la llegada de turistas, en un país como España, en el que el sector aporta más del 12% del PIB, y en las islas más del 40%, demandan una consideración especial. Reclaman un trato favorable para las empresas a las que se ha obligado a cerrar, por ejemplo, en la exención de impuestos.
LOS AUTÓNOMOS NO QUIEREN «EXPERIMENTOS»
El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha celebrado las ayudas del Gobierno aunque cree que llegan tarde. «Bienvenidas sean, pero dejémonos de experimentos», ha pedido líder de la patronal.
Asimismo, Amor ha afirmado que espera que sean ayudas directas como las que han puesto en marcha otros países y ha dejado claro que los autónomos necesitan liquidez ya, tras dejar claro que los trabajadores por cuenta propia tienen agotamiento psicológico y financiero. «El pozo se queda sin agua», ha remarcado.
Sobre los 11.000 millones, Amor ha apuntado que le hubiesen gustado más, porque en estos momentos hay un millón de autónomos y empresas que son los que más dificultades tienen y, según ha resaltado, si se dividen 11.000 millones entre ese millón, tocan a 11.000 euros, mientras que la pérdida media que llevan acumulada hasta ahora es de 21.000 euros, según su barómetro.
«Todavía estamos en déficit con respecto a otros países donde se ha ayudado con el 75% de las pérdidas», ha añadido Amor, que, no obstante, cree que si a esta cantidad se suman las ayudas de las comunidades autónomas, «es aceptable». También ha pedido tener en cuenta que no es lo mismo una ayuda para un autónomo que trabaja de forma individual que para quien tiene tres trabajadores.
Por último, Amor cree que hay que tener cuidado con fijar las ayudas solo a los autónomos o pymes que han solicitado los créditos ICO y ha afirmado que es «una discriminación».
LAS PERNOCTACIONES PROFUNDIZAN SU CAÍDA
Las pernoctaciones en establecimientos hoteleros superaron la cifra de 2,3 millones en enero, lo que supone un desplome del 85% respecto al mismo mes de 2020, por encima de la caída que habían sufrido en diciembre (-81,2%), según ha informado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La crisis sanitaria y las restricciones adoptadas para frenar los contagios sigue notándose en el sector, cuyas pernoctaciones en hoteles acumulan ya once meses de retrocesos interanuales consecutivos.
El hundimiento de las pernoctaciones hoteleras en enero se dejó notar tanto en las realizadas por los extranjeros como en las efectuadas por los españoles, aunque en mucha mayor medida por los primeros, que realizaron un 92,6% menos de pernoctaciones que en enero de 2020, frente al descenso del 71,3% entre los nacionales.
El número de establecimientos abiertos descendió en enero un 39,6% respecto al mismo mes de 2020, hasta situarse en 7.283, cifra que representa un 46,9% sobre el total de establecimientos del directorio.
Canarias, Comunidad de Madrid y Andalucía fueron los destinos principales del total de viajeros en España en enero, con tasas anuales de variación en el número de pernoctaciones con descensos del 92,2%, 77,7% y 84,5%, respectivamente.
Los destinos principales de los viajeros residentes en España son Comunidad de Madrid, Andalucía y Cataluña, que presentan unas tasas anuales de variación de las pernoctaciones con descensos del 66%, 73,1% y 66,2%, respectivamente.
Por su parte, el principal destino elegido por los no residentes es Canarias, con un 42,7% del total de pernoctaciones. En esta comunidad las pernoctaciones de extranjeros bajan un 93,7% respecto a enero de 2020. Los siguientes destinos de los no residentes son Comunidad de Madrid (con un descenso del 88,8%) y Cataluña (con una disminución del 94,2%).