Aena registró unas pérdidas de 126,8 millones de euros en 2020, las primeras de 2012, frente al beneficio de 1.442 millones de euros de un año antes, tras caer sus ingresos un 50,2%, hasta 2.242,8 millones de euros debido a las restricciones a la movilidad provocadas por la pandemia del covid.
Asimismo, el resultado bruto de explotación (Ebitda) registró una caída del 74,2%, hasta los 714,6 millones de euros, incluyendo 22,7 millones de euros de la consolidación de Luton y un impacto negativo de 66,8 millones de euros de Aena Brasil.
Según ha explicado Aena, la reducción del tráfico de pasajeros durante el año en España, del 72,4%, hasta los 76,1 millones de viajeros (del -70,9% si se incluyen el Aeropuerto de London-Luton y de los seis aeropuertos del Aena Brasil), se ha traducido en una caída de la actividad aeronáutica que registra una bajada del 67,1% en sus ingresos.
Los comerciales se anotan un descenso del 16,4%, pero incluyen Rentas Mínimas Anuales contabilizadas no cobradas de 635,5 millones de euros, incluidas las correspondientes al periodo del estado de alarma (198,6 millones de euros), en aplicación de las normas de contabilidad (NIIF 16-arrendamientos).
LOS PROBLEMAS COMERCIALES
Aena continúa, además, con su política de incentivos comerciales diseñados para potenciar la programación de operaciones por parte de las compañías aéreas. Así, el consejo de Administración ha aprobado un nuevo incentivo extraordinario de recuperación de operaciones para la temporada de verano de 2021.
Esta medida, que se aplicará entre el 1 de abril y el 31 de octubre, incentiva el porcentaje de recuperación que supere unos determinados umbrales. Para los tres primeros meses, el umbral de recuperación establecido es del 30% y, para los últimos cuatro meses, del 45%. Todas las operaciones realizadas a partir de esos porcentajes serán incentivadas en su tasa de aterrizaje en el mismo porcentaje de su recuperación, según ha explicado Aena.
El incentivo supone que las compañías recibirán un descuento en la tarifa media mensual de aterrizaje para todas aquellas operaciones que superen los niveles fijados, independientemente del número de pasajeros que transporten.
Asimismo, en marzo entrarán en vigor las tarifas correspondientes a 2021, a las que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha dado su conformidad para su congelación, tras recuperar déficits de ejercicios precedentes.