La Comisión Europea quiere promover la participación directa o indirecta de pymes en el diseño y desarrollo de grandes proyectos de innovación que tiene un especial interés en el conjunto de la UE y que puedan impulsar, por ejemplo, las transiciones verde y digital en el bloque.
Es uno de los objetivos del borrador sobre la nueva política comunitaria de ayudas públicas a Proyectos Importantes de Interés Común Europeo (PIICE) que el Ejecutivo comunitario ha publicado este martes y sobre el que ha lanzado una consulta pública para reunir opiniones de expertos, industria y gobiernos.
La consulta se prolongará durante ocho semanas, hasta el 20 de abril, y busca opiniones relevantes para mejorar el documento que regirá la estrategia europea para conceder subvenciones públicas a empresas que participen en proyectos que sean calificados de especial interés para la UE.
El Ejecutivo comunitario ha evaluado la normativa actual y ha concluido que, aunque ha funcionado «bien en general» y es una «herramienta efectiva» para impulsar estos proyectos, es necesario adoptar «algunos ajustes concretos» para «aclarar» cuestiones relacionadas con el apoyo público que se puede dar.
Dentro de estas modificaciones, la Comisión desea «facilitar una participación directa o indirecta en los PIICE de pequeñas y medianas empresas», en línea con la estrategia industrial del bloque, ha informado en un comunicado.
Para ello, el borrador sometido a consulta «reconoce el papel especial que las pymes juegan en la economía de la UE y propone simplificar el análisis de la Comisión en aquellos casos en los que sea menos probable que la ayuda de Estado distorsione indebidamente la competencia, por ejemplo debido a su montante.
Bruselas también pretende aprovechar la actualización de estas directrices para «aclarar ciertos conceptos», como la definición de «proyecto integrado», y dar más orientaciones sobre los criterios que establece la normativa, por ejemplo en cuanto a las normas aplicables cuando las ayudas europeas provienen de varias instituciones.
Además, el borrador busca fomentar el «carácter abierto» de la normativa sobre PIICE enfatizando que «todos los Estados miembros deben tener la oportunidad verdadera de participar en un proyecto emergente», y su «coherencia» con las prioridades de la UE.