El Ayuntamiento de Madrid quiere dar un paso más en su apuesta por la movilidad sostenible, y reducir el uso del coche privado por las calles de la capital. El emblemático proyecto del carril bici del Eje Prado-Recoletos-Castellana toma forma y sus obras se iniciarán este mismo año.
El delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha explicado durante una sesión de control que el proyecto ya cuenta con cinco tramos definidos por los técnicos municipales. Sumarán un total de siete kilómetros, que conectarán la Glorieta de Carlos V y Plaza Castilla, la vía más larga de la capital. Por el Paseo de la Castellana circulan a diario unos 107.000 vehículos, y este proyecto podría fomentar el uso de la bici para desplazarse por esta arteria.
En cuanto a los tramos definidos del carril, el más amplio cuenta con 2 kilómetros y une Plaza Castilla y Raimundo Fernández Villaverde; otro conecta Raimundo Fernández Villaverde con San Juan de la Cruz; el tercero es San Juan de la Cruz con Emilio Castelar; el cuarto es el tramo entre Emilio Castelar y Colón; y la última conexión es Colón con Paseo del Prado para finalizar en Atocha. Carabante ha desvelado que en las próximas semanas se licitará el primer tramo.
La creación del carril bici de la Castellana se convertirá en “la columna vertebral” de la movilidad ciclista, de la que surgirán el resto de ramales para conectar con los distritos, como el de Joaquín Costa, que le ha propuesto el concejal de Vox Fernando Martínez Vidal.
El área ya trabaja en la elaboración de un anteproyecto para definir plazos y fases. Además, este carril bici debe cumplir tres requisitos: que no congestione el tráfico, que no suponga una afección para los vecinos en cuanto al estacionamiento, y que no restrinja la movilidad peatonal limitando el espacio de las aceras.
MADRID RETOMA EL PROYECTO
La creación del carril bus fue aprobada por unanimidad en el Pleno en noviembre de 2019, pero más de un año después no hay ni rastro de este proyecto. Este lunes, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad ha explicado que en 2021 se iniciarán las obras, sin dar un motivo de por qué no se han ejecutado antes.
Este proyecto se sitúa como un “carril segregado, seguro, uniforme, continuo y bien señalizado, en el que, si se tiene que quitar espacio, sea el del coche, no el del peatón”. Pero la oposición lamenta que, 14 meses después de su aprobación, este plan “sigue en pañales”.
Por otro lado, Borja Carabante ha anunciado que los 12,5 kilómetros de carril bici que eran provisionales pasarán a ser definitivos. Así, en las próximas semanas se pintarán las líneas que lo delimitan, pasando de amarillos a blanco, aunque algunos usuarios insisten en que no son seguros. Estos 12,5 kilómetros suponen un 26% más de carriles bici en la capital.
BOINA DE CONTAMINACIÓN
La boina de contaminación ha vuelto a Madrid, y ya el pasado jueves comenzaron a dispararse los niveles de dióxido de nitrógeno. Así, desde el pasado domingo se encuentra activo el escenario 1 del protocolo anticontaminación del Ayuntamiento, tras superarse el sábado en dos estaciones de medición de la calidad del aire los 180 microgramos por metro cúbico de NO2 durante dos horas consecutivas.
Con el escenario 1 del protocolo, la velocidad de circulación en la M-30 y en las vías de acceso en el interior de la M-40 en ambos sentidos queda limitada a 70 kilómetros por hora desde las seis de la mañana, y se recomienda dejar el coche en casa y usar el transporte público.
En este sentido, la ampliación en el número de kilómetros destinados al carril bici, sumado a un cambio de hábitos por parte de los conductores, reduciría notablemente los niveles de contaminación.
MADRID NUEVO NORTE, 100% SOSTENIBLE
La histórica ‘Operación Chamartín’ se enmarca como un proyecto 100% sostenible, y se ha convertido en el mejor ejemplo del poder transformador y económico del urbanismo sostenible, con una clara apuesta por el desplazamiento sostenible y el uso de bicicletas, patinetes eléctricos y el transporte público.
En un futuro, el carril bici del Eje Prado-Castellana enlazará con Chamartín, lo que permitirá una conexión muy sencilla entre el centro de la capital y este nuevo desarrollo. Según los expertos, la zona norte de Madrid y el centro estarán interconectadas, sin sensación de lejanía.
Además, los desplazamientos en bicicleta entre el centro y Chamartín reducirían el tráfico denso que registra todas las mañanas, ya que, hasta el momento, existen muy pocas alternativas para optar al transporte público.
El CEO de Merlin Properties, Ismael Clemente, aseguraba hace unos meses que “la zona norte ha ido añadiendo mucha capacidad residencial, pero en infraestructuras no porque contaban con los desarrollos de Madrid Nuevo Norte”. Así, ha lanzado Merlin Hub, el mayor ‘business hub’ de Europa, que implica nuevas alternativas para reducir el uso del vehículo privado en la zona.
Por su parte, el presidente de Distrito Castellana Norte (DCN), Álvaro Aresti, cree que se avecina un periodo de grandes transformaciones, “y debemos actuar desde la flexibilidad en el diseño de usos y de espacios”.
La relevancia de este megaproyecto trasciende a escala regional y nacional y su apuesta por la movilidad sostenible podría reducir la presencia del vehículo propio, mitigando la boina de contaminación que sobrevuela Madrid.
Además, Aresti insiste en que algunas de las principales ciudades mundiales están apostando por “crear ciudades más inteligentes, sostenibles y resilientes. Madrid tiene la oportunidad de situarse en este grupo de ciudades, es la gran oportunidad de prepararse para el futuro”, y añade que “en DCN queremos crear el Madrid del futuro”.