MásMóvil juega una estrategia muy arriesgada: la de todos están equivocados menos yo. Así, el operador amarillo ha asegurado durante su presentación de resultados que no subirá los precios a sus tarifas, no entrará en la pelea de televisión y la subasta de espectro para el desarrollo de 5G la mira distante. ¿Todo eso es sostenible?
Antes de empezar a dar explicaciones a los periodistas sobre las finanzas de 2017, el consejero delegado de la compañía, Meinrad Spenger, se congratula con altos directivos de la compañía. Hay sonrisas, miradas cómplices y la sensación de que muchas curvas tienden hacia arriba y eso alegra a los dueños y accionistas. Pero la realidad sobre el negocio; es decir, lo que venden y cómo lo vende, transmite la sensación de que lo importante es hoy, mañana quién sabe.
Detrás de MásMóvil hay un gran fondo de inversión, Providence. La vocación de estas empresas es comprar por poco y vender por mucho. Sobre todo vender volumen y curvas empinadas. Y el operador amarillo tiene muchos indicadores así. El problema es mantenerlos.
Todos los operadores están aumentando a marchas forzadas la rentabilidad de sus clientes. Facturas más altas a cambio de mayores prestaciones y servicios. Más gigas para navegar en el móvil, mayor velocidad… Pero MásMóvil asegura que renuncia a todo eso. Spenger explica que ellos no lo harán; tan solo confirma que los clientes voluntariamente deciden contratar más servicios y, como consecuencia, pagan más. Pero siempre voluntario.
De hecho, el CEO de MásMóvil empieza a sentirse cansado del sambenito de compañía de bajo coste. Por eso, no duda de explayarse en público hablando sobre las demás compañía y sus bajos precios; así como agresivas promociones.
Lo curioso es que al entrar en la web de MásMóvil lo primero que uno se encuentra es esto:
Sí, una promoción de 19,90. Intentando añadir valor a esa factura, por mucho que se quiera incorporar servicios, nunca se paga tanto como en otros operadores, donde algunos paquetes convergentes, debido a la televisión, pasan de los 100 euros por cliente. Así, ¿cómo conseguirá aumentar MásMóvil el ARPU (rentabilidad por usuario) si mantiene precios tan asequibles? La única opción pasa por Yoigo, otra de sus marcas; donde sí hay paquetes que llegan hasta los 89 euros, en los que se incluye 1 Gb/s de velocidad para la fibra. Pero ni rastro de otros añadidos con los que subir eso.
MásMóvil se abraza a seguir creciendo
Por ahora nadie duda de que son el operador que más crece. Según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) el pasado año metieron en su cartera una importante cifra de clientes.
¿Pero podrán mantener ese ritmo? Parece imposible. Básicamente porque los demás también se juegan mucho, de ahí que estén atacando con sus marcas de bajo coste el nicho que, precisamente, más trabaja MásMóvil. Pero luego tienen sus grandes facturas. Y para todo es una obsesión y prioridad.
Hace unos días, el CEO e Orange, Laurent Paillassot, sacaba pecho porque siguen a buen ritmo con la conversión de clientes de ADSL en fibra. Eso, lógicamente, provoca que las facturas de dichos usuarios puedan ser más altas. El objetivo: ser más rentables en un escenario de máxima competencia entre cuatro operadores.
Tampoco con televisión
En esa marcha contracorriente de MásMóvil, la televisión tampoco les preocupa en absoluto, según Meinrad Spenger. Tendrán de alguna manera ese servicio, bajo ciertas condiciones, pero no lo consideran vital ni pujarán por derechos, como por ejemplo el fútbol.
De esta manera, otra posibilidad menos de aumentar la factura. Y el 5G tampoco lo ven desde la compañía como un hecho diferencial, mientras que otros, como es el caso de Vodafone, ya andan a la gresca.
En este escenario, Meinrad Spenger lanza el mensaje de que ellos no subirán los precios, que serán los clientes los que decidan; y que no son una compañía barata. Sobre cómo aumentar la rentabilidad por clientes cuando dejen de crecer, poca información. El dato al que se aferran es que esperan que el 66% de las nuevas altas sean sobre fibra. Pero si es sobre servicios de 20 euros, la ecuación sigue saliendo negativa. Asimismo, si la posibilidad de subir la factura es con una segunda marca, se abre otro melón de imagen: parece que MásMóvil es la firma de bajo coste del grupo; justo lo que niegan en la compañía.