Los contratos de trabajo efectuados en la construcción durante el mes de octubre duraron una media de 86,06 días, más del doble que en la industria (41,91 días) y por encima de la duración media de los contratos en el sector servicios, que fue de 64,41 días.
Pese a todo, la agricultura es el sector donde menos tiempo duran los contratos: apenas poco más de un mes, concretamente 39,94 días de media en octubre, según datos de los Servicios Públicos de Empleo (SEPE).
En octubre se registraron en las oficinas de empleo un total de 1.551.357 contratos, un 30,3% menos que en el mismo mes de 2019, de los que 258.163 se realizaron en la agricultura; 195.045 en la industria; 92.984 en la construcción, y el grueso, en los servicios, donde se hicieron algo más de un millón de contratos.
Pese al fuerte retroceso anual de la contratación, motivado por la pandemia, la duración media de todos los contratos inscritos en los servicios públicos de empleo durante el mes de octubre se situó en máximos en este mes desde 2014, con 58,71 días de media.
No obstante, esta cifra es inferior a la de septiembre, cuando la vigencia media de los contratos de trabajo superó los 61 días, marcando su valor más alto de todo el año 2020 y el más elevado en un mes de septiembre desde 2012.
Fuentes del Ministerio de Trabajo consultadas por Europa Press señalan que la mayor duración de los contratos laborales refleja la labor continuada de la Inspección de Trabajo y recuerdan que la mejora de la calidad del empleo era uno de los objetivos del Plan Director por un Trabajo Digno.
El Departamento que dirige Yolanda Díaz prevé reforzar con más efectivos este organismo, que en 2021, tras cien años de historia, contará con un presupuesto propio por importe de 175,8 millones de euros.
Hay que tener en cuenta además que, con la llegada de la pandemia en marzo, el Gobierno adoptó una serie de medidas para intentar «sujetar» el empleo, entre ellas la imposibilidad de finalizar los contratos temporales indicando como causa el Covid.
No obstante, los contratos temporales que llegaran a su finalización (por ejemplo, por fin de la obra o servicio prestado) sí se han podido extinguir durante la pandemia, salvo que se hayan visto afectados por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), en cuyo caso se mantienen en suspenso hasta la finalización del ERTE.
Antes de la pandemia, en el mes de febrero, la duración media de los contratos era de 52,66 días.
UNO DE CADA CUATRO CONTRATOS DURA MENOS DE 15 DÍAS
Según los datos del SEPE, uno de cada cinco contratos inscritos en los servicios públicos de empleo durante el mes de octubre tenía una duración igual o inferior a siete días.
Concretamente, de los 1.551.357 contratos registrados en octubre, el 20,7% de ellos (321.963) tenía una duración igual o inferior a la semana.
Si se analizan los contratos con una duración igual o inferior a un mes, los datos del SEPE revelan que prácticamente un tercio de los que se inscribieron en octubre igualaba o no llegaba al mes de vigencia.
En total, en octubre se registraron 511.194 contratos con una duración de un mes o inferior al mes. De esta cantidad, más de la mitad presentaba una duración igual o inferior a siete días.
Por su parte, 73.724 contratos (el 4,7%) presentaban una duración de entre una semana y 15 días, mientras que 115.507 (el 7,4%) tenían una duración de entre 15 días y un mes.
SÓLO EL 9,8% DE LOS CONTRATOS SON INDEFINIDOS
Con entre uno y tres meses de duración se efectuaron 159.101 contratos en octubre (el 10,2%), mientras que los contratos de entre tres y seis meses sumaron 87.382 (el 5,6% del total).
Por último, de entre seis y doce meses de duración se registraron 39.938 contratos (el 2,6%), en tanto que 6.082 contemplaban una duración superior al año (el 0,39% del conjunto de contratos).
Asimismo, en el registro del SEPE figuran en octubre 595.341 contratos de duración indeterminada y 152.319 contratos indefinidos, cifra ésta última que equivale sólo al 9,8% del total de contratos efectuados en el décimo mes del año.