El presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO), José Carlos García de Quevedo, ha mostrado su confianza en que la extensión de plazos en las líneas de avales y la decisión de posponer el periodo del pago del principal en doce meses adicionales permitirá aliviar la carga financiera de las empresas.
Así lo ha manifestado García de Quevedo durante su intervención en la segunda jornada del XXVII Encuentro del Sector Financiero, organizado por Deloitte, ‘ABC’ y Sociedad de Tasación.
En este sentido, el presidente del ICO ha recordado que el Consejo de Ministros aprobó ayer la posibilidad de extender el plazo máximo de devolución de los avales de cinco a ocho años, es decir, que los empresarios tendrán tres años adicionales para devolver esta financiación.
Al mismo tiempo, el Gobierno dio ‘luz verde’ a ampliar el periodo de carencia y posponer así el pago del principal en doce meses adicionales respecto al periodo con el que ya se contaba.
«Todo esto permitirá mitigar la carga financiera de las empresas y se podrá seguir manteniendo la liquidez y la solvencia del tejido productivo español, tan necesario en la recuperación económica en marcha», ha explicado.
El ICO ha gestionado la línea de avales del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, la primera de 100.000 millones de euros puesta en marcha en marzo, y ahora una segunda para inversión que «está empezando a rodar.
Esto ha sido todo un ejemplo de colaboración público-privada y de corresponsabilidad compartida muy importante», ha añadido el presidente del banco público, quien ha subrayado que la línea de avales ICO frente al Covid de España ha sido la más eficiente de Europa.
Hasta la fecha se han movilizado más de 105.000 millones de euros en 880.000 operaciones, seguidos de un seguimiento «muy cercano» de monitorización y capilaridad de los distintos sectores, sobre todo en los casos del turismo, ocio, actividades conexas y otros como la distribución comercial o la automoción, que han sido los más afectados.
Asimismo, García de Quevedo ha asegurado que el ICO se comprometió desde un principio a que las condiciones de estas líneas fueran «razonables», en términos de tipos de interés, carencia o cuantía, al tiempo que han respetado la normativa financiera y la normativa de ayudas de Estado de la UE.