La relación entre la Agencia Tributaria (AEAT) y los autónomos nunca ha sido sencilla. No es solo que estos tengan que soportar una importante presión fiscal, es que muchas veces no tienen demasiada formación en cuanto a impuestos y no saben muy bien qué tienen que presentar y cuándo tienen que hacerlo.
Es precisamente ese desconocimiento sobre tributación el que hace que muchos profesionales por cuenta propia no tengan más remedio que recurrir a gestores externos que se encarguen de todo lo relativo a este tema. Y aunque contar con un especialista es una buena opción para tener menos preocupaciones, también supone un gasto añadido que algunos autónomos no se pueden permitir.
La AEAT parece estar dispuesta a ponérselo un poco más fácil a los profesionales y a partir del año que viene pondrá en marcha de forma periódica un nuevo sistema que ayudará en todo lo relativo a la gestión y presentación de impuestos como el IRPF y el IVA.
La AEAT facilita la gestión fiscal a los profesionales
La Agencia Tributaria ha anunciado que a partir del próximo 1 de enero de 2021 estará disponible su servicio de ayuda para facilitar la presentación de los modelos 131 y 303, relativos al pago fraccionado del IRPF y la autoliquidación del IVA respectivamente. Coincidiendo así con el inicio del nuevo período fiscal y el cierre del último trimestre del año 2020.
Esta medida no será nueva, ya que tras el fin del tercer trimestre este sistema ya ha estado operativo durante unos días. La idea es que esto se convierta en algo habitual y los autónomos tengan así a su disposición una herramienta que les facilite la vida en lo que a gestión y presentación de autoliquidaciones se refiere. Por eso, a partir de ahora este sistema estará operativo durante unos días cada vez que acabe un trimestre fiscal.
La idea de la AEAT es ayudar a los autónomos, pero no se queda aquí su intención. Esta herramienta agiliza la presentación de impuestos a través de la Sede Electrónica, de forma que los profesionales no tienen que desplazarse a la sede física de la Agencia Tributaria si tienen dudas o para presentar su documentación.
En un momento como el actual, en el que estamos en plena segunda ola de la Covid-19 y muchas Administraciones Públicas siguen prestando una atención presencial al ciudadano bastante limitada, la puesta en marcha de este sistema de ayuda supone una ventaja tanto para los propios técnicos de Hacienda como para los obligados tributarios.
¿Cómo funciona el servicio?
Basta con entrar en la Sede Electrónica de la AEAT y dirigirse a “campañas” y luego a “módulos”, así se accede al modelo que se desea rellenar. Hay que indicar el tipo de actividad que se realiza, el lugar de ejercicio de la misma, el volumen de ingresos obtenidos a lo largo del trimestre y las amortizaciones, así como alguna información adicional más.
Una vez aportada la información es el personal de la Agencia Tributaria el que se encarga de confeccionar el modelo y lo envía al interesado en formato PDF para que lo firme y lo presente, permitiéndose el pago en entidad bancaria y también el pago telemático a través de la Sede Electrónica de Hacienda.
En este sentido, es importante recordar que los plazos para la presentación de estos impuestos son entre el 1 y el 20 de los meses de abril, julio y octubre para el primer, segundo y tercer trimestre respectivamente, y entre el 1 y el 30 de enero del año siguiente para el cuarto trimestre del año.
El sistema de la AEAT, útil pero no demasiado utilizado
Aunque este sistema ya se viene utilizando desde hace algún tiempo, la propia AEAT manifiesta que su uso no es demasiado habitual. Los expertos creen que esto es debido a que la gran mayoría de los autónomos no elaboran ellos mismos sus autoliquidaciones, sino que las dejan en manos de sus gestores.
Por otro lado, otra de las causas que puede explicar el bajo índice de utilización de este sistema es que no es demasiado conocido entre los autónomos. El sistema de tributación es tan complejo que muchos profesionales se han dado ya por vencidos y lo dejan todo en manos de especialistas, sin pararse a pensar si existe alguna otra alternativa que les permita cumplir con sus obligaciones fiscales en tiempo y forma sin necesidad de tener que contar con un asesor externo.
Los tributos, un tema pendiente para los autónomos
La fiscalidad de los autónomos es un tema bastante complicado, y España no es un país en el que haya una cultura financiera ni fiscal demasiado extendida, por lo que cuando muchos profesionales inician su actividad no saben qué impuestos van a tener que presentar o cómo tienen que elaborar una factura para que esta sea totalmente legal y evitarse así problemas con Hacienda.
Aunque todo el mundo ha oído hablar de conceptos como el IVA o el IRPF, lo cierto es que la liquidación de los mismos resulta complicada para quienes no tiene formación en materia fiscal. De ahí que se suela decir que la formación en este tipo de temas en una asignatura pendiente para los profesionales que trabajan por cuenta propia.
De hecho, no es extraño encontrarse con autónomos que no saben muy bien qué pueden y qué no pueden desgravarse, lo que da lugar a errores o incluso a acabar pagando de más por no haber desgravado algo que sí se podía.
La nueva herramienta de la AEAT busca ponérselo un poco más fácil a los autónomos que tienen que presentar sus autoliquidaciones, y más en estos momentos en que el cobro de ayudas o el cierre de negocios puede hacer que la gestión de impuestos se complique todavía un poco más. No obstante, parece que la mayoría de los profesionales se sienten más tranquilos si dejan estos temas en manos de gestores expertos. Por eso no ven la contratación de una asesoría como un gasto, sino como una inversión que les quita preocupaciones de encima.