La jubilación es una prestación pública aportada como compensación tras una vida laboral. Esta paga se calcula en función de los años cotizados y de lo que se ha aportado a las arcas públicas. Por lo general, se tiene que cotizar al menos 15 años como mínimo para poder acceder a ella. No obstante, muchas personas no pueden llegar a esa cifra de cotización a la Seguridad Social. En estos casos, en principio, no se reunirían los requisitos mínimos para poder disfrutar de esta paga. En cambio, todas esas personas no quedarán totalmente desamparadas…