Salir al exterior en épocas de crisis económica ha sido la alternativa para seguir creciendo y hacer caja. De hecho, a las marcas de moda españolas les ha ido especialmente bien, pues en 2016 facturaron casi 23.000 millones de euros. Y dentro de estas, Mango se alza como las más internacional de todas, por encima incluso de Inditex o Cortefiel.
Actualmente, Mango está presente en 111 países. Eso quiere decir que, si cogiéramos un globo terráqueo, la firma catalana coparía más de la mitad de medio mundo. Y si estuviéramos jugando al juego de estrategia Risk, la compañía ya habría invadido medio tablero y ganado a muchos de sus rivales.
Según el estudio ‘Atlas de la Moda’, realizado por el ICEX, el Foro de Marcas Renombradas Españolas (FMRE) y Modaes, el 79% del negocio de Mango está en el exterior, mientras que un 21% es nacional. Mango cuenta con 1.838 puntos de venta en el exterior que dan trabajo a 10.250 trabajadores aproximadamente. Francia (211 tiendas), Alemania (141), Turquía (116) y Rusia (147) son sus principales mercados.
Y es que, al igual que en el juego de estrategia, el objetivos es hacerse con determinadas regiones objetivas. La firma ha lanzado un plan estratégico para 2018 en el que se prevé casi una veintena de nuevas aperturas en países como Israel, Emiratos Árabes o Qatar. El pasado año incorporó 24 puntos de venta en países como Arabia Saudí, Israel, Irán o Qatar, hasta alcanzar las cerca de 160 tiendas. Entre las aperturas más destacadas se encuentran las de las ciudades de Doha (Mirqab Mall y Festival City), Teherán o Carmiel.
Oriente Medio es uno de los mercados más relevantes para la firma. Esta está presente en 14 países. La facturación de este mercado supuso en 2016 un 7% del total de la cadena. Hace menos de un año lanzó también la adaptación de su web y ecommerce a este mercado.
«Nuestro modelo de expansión actual pasa más por crecer en países donde estamos presentes y aumentar nuestra capilaridad antes que entrar en nuevos mercados, aunque no descartamos nuevos territorios», aseguran desde Mango.
Por delante de Inditex
Su historia internacional comienza en 1992 con la apertura de la primera tienda en Portugal. La siguiente sería en Francia y así hasta 111 países.
Su llegada a Oriente Medio es posterior al desembarco en China, donde la firma fundada en 1984 abrió su primera tienda en Pekín en 2002. Cuatro años después inauguró un centro logístico. Mango abrió las puertas de este país para que otros, como Amancio Ortega, aterrizaran con Zara en el mercado chino.
Y es que, a pesar de la popularidad de las marcas de Inditex, en presencia exterior las cuatro marcas de Mango (Woman, Man, Kids y Violeta) es superior. Inditex está en 94 países, mientras que Mango 111. Según el Atlas de la Moda, Agatha Ruiz de la Prada está en 107 mercados, Pronovias en 105, Joma en 102 y el Grupo Cortefiel en 89. Son las más internacionales del sector.
La internacionalización de la moda
La moda española está impregnada de un fuerte carácter internacional. Tanto es así que entre 2000 y 2016 el número de exportaciones ha crecido un 140% hasta los casi 23.000 millones.
De hecho, durante la crisis económica ha sido una alternativa para el crecimiento. “Son seis años de crecimiento en el exterior”, indicó el consejero delegado del ICEX, Francisco Javier Garzón, durante la presentación del estudio. Además, también recordó que la moda supone un 7% del total de exportaciones española.
Con el sector afianzado, ya solo quedan por delante algunos retos como adaptarse al nuevo tipo de consumidor, convertir el impacto de la digitalización en oportunidades o abordar el futuro incierto de los puntos físicos. Además de la llegada a otros países no explorados por algunas firmas como Libia o Bután. Y aquí puede comenzar otra partida de Risk para Mango y el resto de rivales.